- Las obras para peatonalizar la bilbaina calle Iparraguirre comenzaron ayer y se prolongarán durante los próximos once meses. El proyecto municipal, acordado con los vecinos y con la asociación de comerciantes de BilbaoCentro, pretende mejorar un eje que conecta dos equipamientos culturales: Azkuna Zentroa y el Museo Guggenheim. Con un presupuesto de 1.600.000 euros, en la primera fase, comienza un proyecto de ciudad que pretende unir diferentes ejes culturales y comerciales de la villa a través de un espacio de 8.500 metros cuadrados.

La semipeatonalización de la calle Iparraguirre es algo más que un proyecto urbanístico. El concejal de Planificación Urbana, Asier Abaunza, señaló ayer que "persigue, por una parte, ensanchar las aceras, que pasarán de tres metros y medio peatonales a cinco metros y medio, y, poner en una plataforma única la calzada para los vehículos en el trazado desde la plaza San José hasta el Guggenheim". La transformación de esta zona incluye homogeneizar el mobiliario urbano de las terrazas del entorno. Abaunza matizó, sin embargo, que no van a crecer. "No van a ocupar más espacio, pero sí cambiaremos su mobiliario por uno de madera más acorde con lo que vamos a hacer". Otra de las actuaciones afectará al arbolado, "serán sustituidos los árboles de toda la calle y en su lugar vamos a plantar cerezos japoneses que en primavera llenarán toda la calle Iparraguirre de flores", explicó el concejal.

Estas actuaciones cambiarán la perspectiva de una calle que en el futuro será el trazado de conexión entre el Guggenheim y Azkuna Zentroa. Durante los once meses que durará la obra, el Área de Planificación Urbana intentará minimizar las afecciones y las molestias, tanto a las actividades económicas como a los vecinos de, entorno, según se comprometió el concejal. Abaunza es consciente de que "once meses generarán molestias, por lo que pedimos paciencia y comprensión en cuanto a la ejecución de las obras ". El edil resaltó que el objetivo último es la mejora del eje vertebrador. "Supone una relevante transformación urbanística y estética", afirmó.

En función del avance de los trabajos, la zona donde se realizarán los tajos será vallada con anterioridad. Además, la circulación de vehículos estará permitida y habrá paso libre para los peatones en todo momento, tal y como han sido informados los vecinos a través de un aviso colocado por técnicos municipales en los portales de los inmuebles de la zona.

La licitación para las obras de semipeatonalización de una de las calle céntricas de la villa salió a concurso en el pasado julio. Los presupuestos del Ayuntamiento de Bilbao para 2020 tiene reservada para las obras una partida que asciende a 2.881.550 euros. En la primera fase no se acometerá la iluminación, uno de los asuntos que en su día fue cuestionado por los vecinos, por lo que el proyecto inicial fue cambiado en aras de la seguridad.

La transformación de la vía está en el punto de mira del Consistorio desde hace años, por lo que antes de llevar a cabo el proyecto mantuvo reuniones de trabajo y participación con vecinos, comerciantes y hosteleros de la zona para buscar soluciones que fueran compartidas por todas las partes.

La semipeatonalización de la calle Iparraguirre no solo es una obra que mejorará la vida de los vecinos del entorno, sino que trata de crear un nuevo eje que permita a los turistas acceder de manera natural desde las inmediaciones del Guggenheim a otras zonas de la villa.

11 meses

Las obras comenzaron ayer y se prolongarán durante once meses en los que vehículos y peatones podrán circular con libertad por la zona.

8.500

La zona afectada en la primera fase, comprendida entre alameda Mazarredo y la plaza San José, abarca una superficie de 8.500 metros cuadrados.

2.881.550

Los presupuestos del Ayuntamiento de Bilbao contemplan una partida para esta primera fase de 2.881.550 euros.

Requisitos cumplidos. Entre el 27 de febrero y el 1 de marzo la Policía Municipal de Bilbao llevó a cabo la primera campaña de vigilancia y control del Plan Estratégico de Seguridad Vial del País Vasco de las licencias de Vehículos de Transporte con Conductor (VTC), demanda de los taxistas para garantizar que la nueva competencia cumple con la normativa. La vigilancia se llevó a cabo a lo largo de todo el día y, siguiendo lo planificado por la División de Seguridad de la Policía Municipal de Bilbao, los agentes que realizaron los distintos controles supervisaron dos tercios de los vehículos de estas características que circulan por Bilbao durante los días en los que transcurrió la campaña. Tras completar la campaña, los agentes no realizaron ninguna denuncia ni contra los vehículos ni contra los conductores, ya que todos cumplían los diferentes indicadores de las vigilancias y controles establecidos. Desde el Ayuntamiento señalaron que, las vigilancias y controles sobre este tipo de vehículos no pueden ser estáticas, como suele ser habitual en campañas sobre otros aspectos tales como cinturones de seguridad, alcoholemias, documentación..., ya que los VTC circulan libremente por la ciudad y su número no es muy elevado.