Fomentar hábitos de lectura de tal forma que la ciudadanía de Galdakao pueda tener siempre a mano un libro de forma gratuita. Es el principal objetivo del innovador proyecto de bibliotecas urbanas puesto en marcha hace dos años por el Ayuntamiento. La iniciativa se comenzó a implantar en el barrio de Urreta y, dada la buena acogida obtenida, ahora se ha extendido ahora a otras zonas del municipio.
A través de este nuevo impulso, el Consistorio pretende “seguir acercando la lectura a todos los rincones de Galdakao de forma progresiva”. Para ello, se han instalado tres nuevas bibliotecas urbanas: en el parque de Txistulanda, al lado de la Ludoteca de Bengoetxe y en la entrada del parque de juegos cubierto de Berezikoetxe. “Además, se ha renovado la biblioteca que había en Urreta, al estar deteriorada por el paso del tiempo”, indica.
El nuevo paso dado se ha presentado en la biblioteca urbana de de Txistulanda, “al ser las personas de este barrio las principales impulsoras de la propuesta, a través del proceso de los presupuestos participativos para 2023-24”. Allí se reunieron vecinos y representantes municipales, como la concejala de Cultura, Edurne Espilla, y la concejala de Participación, Maite Arandia. También acudieron menores de entre 3 y 11 años de las Ludotecas de Galdakao que disfrutaron escuchando con atención las explicaciones e historias de una cuentacuentos y elaboraron con mimo, a mano, sus propios marcapáginas para los libros.
Lectura accesible
Las bibliotecas urbanas consisten en armarios en los que cualquier persona puede dejar y coger libros, impulsando así unos hábitos más sostenibles entre la ciudadanía al tiempo que se da una segunda vida a estas publicaciones literarias. El Ayuntamiento de Galdakao precisa que, además de cuentos y textos infantiles, también hay en estos espacios propuestas de lectura para jóvenes y adultos.
La idea es que “el trasiego de libros, darlos y recibirlos, sea constante” y solicita la participación de la ciudadanía y de todos los agentes, “ya que cuidar y alimentar las bibliotecas será responsabilidad de todos”.
