Una hoja de ruta con 34 líneas estratégicas y más de un centenar de actuaciones específicas, centrado en el empleo inclusivo, la emancipación juvenil, la transición ecológica y digital y la mejora de la gobernanza pública. Este es el diseño Plan Territorial de Empleo 2024–2029, presentado este jueves por la Diputación Foral de Bizkaia, después de que el precedente (2020-2023) contara con una inversión de 75 millones de euros y alcanzara a más de 42.000 personas, de las que más de 20.000 consiguieron un puesto de trabajo, amén de lograrse un retorno económico de 2,15 euros por cada euro público invertido.

"El empleo está hoy en el centro de las preocupaciones de las empresas, de las instituciones y de la ciudadanía. Se trata del principal vector de inclusión social y de sostenibilidad comunitaria”, se ha felicitado la diputada foral de Empleo, Cohesión Social e Igualdad, Teresa Laespada, quien enfatizó el enfoque integral del nuevo plan.

Cuatro grandes retos

La también teniente de diputada general ha catalogado el plan como “un instrumento de liderazgo público al servicio del bien común”. No en vano, encara cuatro grandes retos estratégicos: promover el empleo inclusivo y con derechos, facilitar la emancipación juvenil, liderar la transición ecológica y digital del tejido productivo, y mejorar la gobernanza institucional. Todo el planteamiento se organiza en torno a orientación, activación, acompañamiento, autoempleo, economía de cuidados, vertebración territorial, digitalización y evaluación continua.

Con un enfoque estructural de territorialización, el plan prevé actuaciones diferenciadas por comarca, adaptadas a las especificidades socioeconómicas locales. Asimismo, incorpora de forma transversal los principios de equidad, inclusión y perspectiva de género. Laespada ha recordado que su elaboración se nutre de la evaluación participada del Plan de Empleo 2020-2023, resultando clave para incorporar sus conclusiones y propuestas de mejora. “Las políticas deben evaluarse en resultados, calidad e impacto. Medir eficacia y eficiencia promueve transparencia y rendición de cuentas”, ha recalcado la dirigente socialista para quien “el aprendizaje de resultados es clave para la toma de decisiones basada en evidencias y la mejora continua”.

Ecosistema del empleo

El Plan 2024–2029 no parte de una hoja en blanco sino que es el resultado de una evolución estructurada y contrastada, sumando las recomendaciones y aprendizajes del anterior, consolidando un enfoque de mejora continua y evaluación constante, apoyado en herramientas como el modelo SROI, una matriz de evaluación y un sistema robusto de indicadores (SIR). La ejecución estará liderada por la Dirección de Empleo de la Diputación Foral de Bizkaia, en estrecha coordinación con DEMA (Agencia Foral de Empleo y Emprendimiento), Bizkaia Mikro, Lanbide, la Red Sarekin, los servicios municipales y más de un centenar de entidades que conforman el ecosistema del empleo.

La gobernanza institucional se organizará a través de una Comisión Técnica de Seguimiento. “Convertir a la Diputación Foral en un referente activo dentro de la Red Vasca de Empleo” es, según Laespada, una de las aspiraciones del Plan, que se alinea con la Ley Vasca de Empleo (15/2023), la Agenda 2030, los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la Estrategia Vasca de Empleo y otros marcos estratégicos nacionales e internacionales.

En resumen, se enmarca en una política pública anticipativa, planificada y basada en evidencias, "concebida para garantizar un empleo digno, sostenible y accesible para toda la ciudadanía de Bizkaia".