Allá por el año 2013, el Ayuntamiento de Portugalete apostó por colocar varios tramos de rampas mecánicas en la calle Almirante Martín Vallecilla con el propósito de mejorar la accesibilidad de esta zona de la noble villa. Desde entonces, ha llovido mucho, pero, por desgracia, estas rampas mecánicas han funcionado bastante poco, puesto que han ido acumulando una avería tras otra, lo que ha hecho que no hayan cumplido la función para la que fueron proyectadas. De hecho, estos accesos mecánicos que debieran mejorar la accesibilidad entre el centro de la noble villa y el ambulatorio de Repelega, llevan paradas de forma ininterrumpida desde 2022. Por si todo eso fuera poco, tal y como se recoge en un informe solicitado por el grupo municipal del PNV, a lo largo de estos once años la institución local ha invertido, al menos, 2,135 millones de euros en estos accesos mecánicos. “Es un dinero que hemos tirado a la basura”, criticó Txema Ezkerra, portavoz del PNV en el Ayuntamiento.
Desglosados esos gastos, 81.000 euros corresponden a la partida destinada a la redacción del proyecto, mientras que los 2,054 millones de euros restantes, corresponden a las labores de suministro e instalación de estas rampas mecánicas. A todo ello, hay que añadirle todas las reparaciones e inspecciones que se han llevado a cabo a lo largo de estos once años y que están fuera del contrato de mantenimiento de este tipo de accesos mecánicos. “No vale que digan que es un proyecto que ha salido mal. Creemos que merecemos alguna explicación más. Tenemos que saber qué ha pasado, qué responsabilidades se van a asumir y qué explicaciones nos van a dar”, apuntó Ezkerra.
Lo cierto es que las rampas mecánicas de Vallecilla han supuesto un fracaso. Desde su inauguración los problemas y paros en el servicio fueron bastante recurrentes, una situación que se agravó desde el año 2018 y que no hizo más que empeorar hasta que en 2022 funcionasen por última vez. Han pasado ya dos años desde que se viera estas rampas funcionar y, hoy día, el Consistorio jarrillero acaba de licitar la redacción del proyecto para sustituir las rampas actuales por unas nuevas y que, estas sí, cumplan la función para la que van a ser creadas. “El proyecto está en proceso de licitación, un proyecto que va con once meses de retraso porque se podía haber licitado en junio del pasado año”, indicó Ezkerra.
Ahora, a la ciudadanía jarrillera le toca seguir esperando para volver a ver en la calle Almirante Martín Vallecilla unas rampas mecánicas que funcionen. Y es que, una vez se redacte este proyecto, tocará dotar de una partida económica a estos trabajos que, más tarde, deberán ser licitados para, posteriormente, iniciarse los trabajos. Por todo ello, desde el PNV de Portugalete estiman que las rampas mecánicas de Vallecilla estarán listas “no antes del inicio del año 2026”. Si se cumpliese ese plazo, serían casi cuatro años los que pasaría este punto clave de Portugalete sin rampas mecánicas y, todo ello, tras haberse dejado un importantísimo montante económico en reparaciones y la creación del nuevo proyecto.