Sesenta imágenes de gran formato envuelven el casco histórico de Balmaseda con la atmósfera de su Pasión Viviente en una exposición con visitas guiadas incluidas que constituye la principal novedad de la programación en torno a la Semana Santa. Reflejan la unión de la villa con su tradición más significativa, que está a punto de repetir su liturgia de actividades con el punto álgido en la representación del Jueves y el Viernes Santo. Hoy mismo, catorce penitentes peregrinarán por tercer año consecutivo hasta el monte Kolitza reproduciendo las estaciones del Vía Crucis en un recorrido que finalizará frente a la ermita de San Sebastián y San Roque, a 879 metros de altitud iniciando la cuenta atrás para los cerca de 700 participantes. Jon Ortiz de Vallejuelo, de 27 años, interpretará a Jesús.

“Comienzo a sentir la responsabilidad porque hasta que te toca no sabes lo que es”, confesaba en la tradicional comida con sus antecesores, una reunión vigente desde 2004 en la que le arroparon otros 34 Jesuses que entienden perfectamente la vorágine que está experimentando. Todos coincidieron en recomendarle que viva estos inolvidables momentos a su manera. Los mismos consejos que brindaron las Magdalenas a Raquel Rodríguez, que también va a tener un conmovedor papel en la representación.

Pasión Viviente Balmaseda MIKEL GOIKOETXEA

Tras la primera procesión de pasos a las 19.00 horas, el Jueves Santo a partir de las 21.30 horas se escenificarán en la plaza de San Severino el concilio de los Sumos Sacerdotes, la Última Cena, la Oración en el Huerto de los Olivos, el prendimiento y la comparecencia de Jesús ante el Sanedrín y su posterior condena. Las palabras de Caífás “ahora serás conducido ante el gobernador romano Poncio Pilato para que decida tu suerte” dejarán la tensión en todo lo alto tras los pasajes con mayor carga de diálogo para los que Jon lleva meses ensayando. Las localidades sentadas en un espacio iluminado con antorchas que añadirán calor y solemnidad requieren comprar entrada.

Al día siguiente la representación se retomará a las 9.30 horas en el Campo de las Monjas. Para acceder al recinto a contemplar el ahorcamiento de Judas, el juicio de Cristo ante Poncio Pilato, la flagelación y los encuentros con la Virgen María y María Magdalena se necesitará también entrada. Quince minutos antes cada uno deberá ocupar su localidad correspondiente.

Tres caídas bajo la cruz Allí mismo Jesucristo se derrumbará bajo el peso de la cruz por primera vez. Cuando la comitiva abandone el Campo de las Monjas el recorrido continuará por el casco histórico de Balmaseda. A los pocos metros la guardia romana capturará a Cirineo en su huerta para obligarle a ayudarle a cargar con el madero. Se le irán sumando otros personajes como la Verónica y el niño ciego en las sucesivas estaciones. Las otras dos caídas, que concentrarán la atención de las miles de personas distribuidas en el centro de la villa, se desarrollarán en la plaza de San Severino y la plaza de San Juan.

Desde allí se dirigirán a cruzar el Puente Viejo, otro de los puntos más fotografiados. La recta final del trayecto les conducirá hacia el exterior del frontón, escenario de la crucifixión sobre una estructura de cincuenta metros de ancho por quince de alto. La representación concluirá con el descendimiento de la cruz para el traslado de Cristo al sepulcro. El mismo viernes por la tarde algunos personajes toman parte en la procesión del entierro, a partir de las 19.00 horas. Por último, a las 21.30 horas en la procesión del silencio las tropas romanas y el público portando velas escoltarán al Cristo del Cementerio en su vuelta al camposanto acompañado de la Virgen Dolorosa, que emprenderá su regreso. El fin de semana siguiente tomará el relevo la procesión infantil de La Magdalena y los días 20 y 21 de abril la juvenil de Santo Domingo.

Las fotografías permanecerán en la calle hasta el 7 de abril, como las de otra exposición situada en el palacio Horcasitas y vuelve a convocarse el concurso en memoria de Javier Santa Coloma que premiará las mejores instantáneas de esta edición de la Pasión Viviente.