Santa María Ikastetxea es uno de los dos centros educativos de Euskadi que cuentan con el diploma que otorga Unicef Euskadi para reconocer las buenas prácticas en materia de defensa de los derechos de la infancia. Así las cosas, una delegación de Unicef Euskadi, encabezada por su presidente Isidro Elezgarai, acudió ayer al centro educativo portugalujo para hacer entrega a los dirigentes de Santa María Ikastetxea de esta distinción. Este reconocimiento estará vigente hasta finales de 2025 y, actualmente, ya está expuesto en el hall de entrada del centro.
De este modo, el centro educativo de Portugalete ve reconocida su labor diaria para que su alumnado esté informado de los derechos que le asiste por el mero hecho de ser menores de edad. Y ese trabajo no es baladí, puesto que, actualmente, Santa María Ikastetxea cuenta con 1.300 alumnos y alumnas. “Que alguien desde fuera reconozca algo de lo que haces en el día a día del centro es un sueño. Hacemos muchas cosas, pero, muchas veces, dentro de la dinámica del propio centro no somos conscientes de todo lo que hacemos y, a nosotros, Unicef nos ha abierto los ojos acerca de muchas cosas que hacemos. Este reconocimiento es, también, una plataforma, un gran punto de partida desde el que seguir mejorando de cara al futuro”, desarrolló Alfonso Blázquez, director de Santa María Ikastetxea.
La decisión de Unicef Euskadi de otorgar a este centro educativo el diploma que les acredita como un referente en educación en derechos de la infancia llega tras haber sometido a Santa María a una auditoría externa en la que se han valorado hasta 30 aspectos. “Eran ítems muy específicos y han supuesto todo un revulsivo para que siguiésemos mejorando”, reconoció Blázquez.
En este aspecto, cabe destacar que entre los aspectos a valorar por Unicef figuraban cuestiones como la propia implicación del alumnado en todo su proceso de aprendizaje. Dicen que lo difícil no es llegar, sino mantenerse y en Santa María reconocieron que seguirán trabajando para mantener este reconocimiento a sus buenas prácticas más allá del año 2025. “El objetivo es seguir mejorando y mantener este reconocimiento”, concluyó Blázquez.
