Zalla Bai ha sacado adelante el primer presupuesto de la legislatura con el apoyo de EH Bildu, imprescindible dado el empate a concejales con el PNV que depararon las urnas en mayo. Unas cuentas de 12,4 millones de euros en las que “hemos tratado de ser excesivamente conservadores y continuistas al seguir con programas y necesidades que son las que existen”, argumentó el alcalde, Unai Diago, en respuesta a la enmienda a la totalidad jeltzale que no salió adelante. La formación censura que “aumente el gasto en personal municipal mientras eliminan y reducen acciones y proyectos que repercuten directamente en el bienestar de la ciudadanía”, como los de atención a la soledad, el educador de calle y la atención psicológica gratuita.

Respecto a este último, el regidor esgrimió que no se trata de una supresión definitiva, sino que el Ayuntamiento trabaja con el Colegio de Psicólogos en su revisión “para estudiar cómo se lleva a cabo en otros municipios y nos hemos emplazado” con el fin de analizar su recuperación de cara a ejercicios posteriores.

El presupuesto contempla también la contratación de técnicos de deportes y sociosanitario para cubrir la necesidad que el equipo de gobierno detecta de una figura que actúe a modo de puente entre las instituciones y servicios de base o clubes. Además, explicaron el aumento en la partida dedicada al polideportivo porque está previsto que la gestión sume en 2024 “el equivalente a 39 ó 40 días de trabajo”.

El portavoz de EH Bildu, Enrike Hernández, advirtió que el borrador no termina de resolver problemas de “vivienda, transporte, movilidad, empleo, transición energética o lucha contra la exclusión”. Por ello, presentó seis enmiendas que “mejoran” el proyecto, agradeció el alcalde. Propuestas como “50.000 euros para instalar en el frontón paneles que capten la energía solar y otras partidas para mantenimiento de pistas forestales, un auzotaxi para mayores de 70 años o con necesidades sociales, promoción laboral, ayudas al alquiler o incremento de las Ayudas de Emergencia Social”, señaló Enrike Hernández.

A juicio del anterior regidor, Juanra Urkijo, “EH Bildu le regaló la Alcaldía a Zalla Bai y, por lo que parece, le va a regalar la legislatura”. Así resumía el posicionamiento del PNV sobre un presupuesto que “elimina aquellos proyectos que dan soporte a quien más lo necesita y, sobre todo, a quien no tendrá capacidad para protestar: es abusar de quien creemos que no puede defenderse”.

Asimismo, “tampoco aparecen inversiones necesarias, como la piscina cubierta, la conversión de la residencia en unidades convivenciales o la ampliación de la biblioteca en los antiguos locales de Lanbide”.

Enmiendas

De PNV y EH Bildu. Zalla Bai y EH Bildu volvieron a unir sus votos para desestimar una enmienda a la totalidad del PNV. La coalición independentista presentó seis.

Empate

6

El empate a seis concejales con el PNV obliga al equipo de gobierno de Zalla Bai a buscar acuerdos con EH Bildu para sacar adelante sus propuestas.