“Con la actuación en Mimetiz, las inundaciones de finales de 2021 y principios de 2022 ya demostraron que la situación es muy distinta. Yo estuve aquí. La obra se comportó muy bien y aguas arriba no se produjeron salidas”, rememoró el director general de la Agencia Vasca del Agua-URA, Antonio Aiz, sobre los recientes desbordamientos del Kadagua. Por eso, para las próximas actuaciones de defensa contra inundaciones en Aranguren se optará por el mismo tipo de solución: ampliar la sección hidráulica del río y nuevos cauces, en este caso dos, que canalicen las precipitaciones. Así, “se reducirá sustancialmente la vulnerabilidad de todo el ámbito urbano de Zalla”. En otras palabras, como definió muy gráficamente el alcalde, Unai Diago, “damos las gracias a URA por la relación que mantiene con este Ayuntamiento para ayudarnos a quitarnos la espada de Damocles que llevamos toda la vida soportando encima de nuestras cabezas”.
Con una inversión de 16 millones de euros –que cuentan con financiación de 2,7 millones de euros de fondos europeos Next Generation que fijan que la intervención ha de terminar para 2025– y un plazo de ejecución de 18 meses, los trabajos darán respuesta a las inundaciones “recurrentes y potencialmente muy graves”, explican desde URA, “motivadas por la insuficiente capacidad del cauce actual para albergar los caudales de las crecidas”. Situación que “se ve agravada por la presencia de estructuras en el cauce que ejercen un efecto de obstrucción al flujo”. El daño medio esperado de “1,08 millones de euros al año” debido a la frecuencia de las riadas y la población en peligro estimada en 273 habitantes al año hacen de Zalla “una de las zonas con más alto riesgo de inundación de la Comunidad Autónoma Vasca.
Las intervenciones abarcarán 2,4 kilómetros, entre la estación de Aranguren y el barrio de El Baular. Consistirán en la creación de plataformas para ampliar el cauce en ambas márgenes y dos cauces auxiliares en los meandros, tanto a la altura de Ojivar-San Juan como de Oreña, “para absorber las aguas altas. Además, se rebajarán el azud de la papelera y su permeabilización, y se construirán una serie de defensas longitudinales o encauzamientos”, detallaron.
Proyecto ferroviario
Con el propósito de evitar episodios como el grave desbordamiento de enero de 2015 y los sustos que todos los años mantienen en vilo a los vecinos, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Adif, URA y el Ayuntamiento suscribieron un protocolo de colaboración en la reordenación de la red ferroviaria con la supresión de pasos a nivel y más de un kilómetro de vía y la protección frente a desbordamientos. Y es que “confluyen en los dos puentes del tren que cruzan el río debajo del puente de la Papelera”.
Respecto a las obras ferroviarias, “el Ministerio de Transportes ha terminado un estudio informativo. En cuanto las alegaciones estén resueltas pasará a Adif para la aprobación inicial del proyecto básico, tras lo cual se abrirá otro período de alegaciones; se mandará nuevamente a Adif para la expropiación y adquisición de terrenos y después iría al Ministerio” para el visto bueno definitivo, detalló el alcalde.
Al detalle
2,4 kilómetros. La intervención se llevará a cabo entre la estación de Aranguren y el barrio de El Baular, con la ampliación de ambas márgenes y dos nuevos cauces.
Licitar “cuanto antes”. El convenio suscrito ayer estipula que el Ayuntamiento de Zalla gestionará los terrenos para ejecutar las obras, mientras que URA asumirá su realización y financiación. El objetivo es licitarlas “cuanto antes”.
