El tráfico viario en 2022 casi retomó su intensidad previa a la pandemia

El tráfico de vehículos por la red viaria de Bizkaia que controla la Diputación Foral retomó prácticamente la intensidad que presentaba en 2019, antes de la pandemia. Tras dos años de anomalía constante en la movilidad del territorio como consecuencia de la presencia del coronavirus, el pasado ejercicio la normalidad volvió a las mismas cifras que hace tres años. Según el estudio sobre la evolución del tráfico en base a las 18 estaciones permanentes de control ubicadas en los puntos clave de la red viaria foral, casi 847.000 vehículos circularon de media cada jornada. Una cifra que se queda a un 1,8% de los casi 862.000 tránsitos diarios que se registraron durante el año 2019 antes del tsunami que supuso para la sociedad la pandemia.

Según las cifras iniciales, los conductores de vehículos ligeros han recuperado más sus costumbres de movilidad que los camioneros y el tráfico pesado. Los datos indican que los tráileres se han mostrado más remisos a la hora de retomar las cifras de 2019 al quedarse en 50.703 tránsitos pesados durante 2022 en lugar de los 53.455 contabilizados en 2019. Es decir, una caída del 5,1%.

El informe realiza un análisis especifico sobre cómo se ha comportado la movilidad por carretera antes, durante y una vez finalizados los efectos del coronavirus. Así, destaca cómo en los momentos más críticos, cuando en el mes de abril de 2020 se paralizó prácticamente toda la actividad de la sociedad con el confinamiento y la restricción de la actividad social solo a las necesidades más urgentes, el tráfico diario de ese mes se quedó tan solo en algo más de 272.000 vehículos de media.

Abril, máximo descenso

Fue el máximo descenso registrado, un 67,4% menos de tráfico con respecto al abril normal de 2019. El mayo siguiente fue el siguiente mes de rebaja: casi un 42% negativo, al contabilizarse cerca de 520.000 vehículos de media diaria. El hecho de que el transporte por carretera fuera considerado como sector esencial para abastecer de alimentación a supermercados y grandes superficies y los autobuses para trasladar a los trabajadores también tiene reflejo en las estadísticas aunque de un modo menos gravoso.

Así, en el mes más negro de 2020 el tráfico pesado cayó un 42% al circular por las vías menos de 30.000 camiones diarios de media, mientras que el mayo siguiente la rebaja se atemperó al quedarse en un 28,7% y un total de 41.176 transportes pesados y autobuses.

Por lo que se refiere a los entradas y salidas de vehículos tanto al territorio de Bizkaia como específicamente a Bilbao, las diferencias entre el pasado ejercicio y 2019 son algo mayores que las cifras generales. Así, el tráfico en los accesos a Bizkaia desde los territorios colindantes de Cantabria, Burgos, Araba y Gipuzkoa supuso una disminución del 4,6% al quedarse en una media diaria de algo más de 172.000 vehículos el pasado ejercicio en vez de los casi 181.000 del año 2019.

En la capital descendió algo menos, un 4,4%, al registrarse 318.170 vehículos de media diaria en 2019 y 304.234 el pasado ejercicio. Destaca el hecho de que los flujos de tráfico son mucho más intensos y cuantiosos teniendo como origen y destino la capital que todo el conjunto del territorio ya que, mientras en Bilbao se cuantificaron una media de 304.000 vehículos diarios, en Bizkaia se quedaron en algo más de 172.000 tránsitos un 44% menos de tráfico.

Con respecto al curso 2021, el repaso a las cifras generales de tráfico del pasado año fueron lógicamente al alza: un 6,5% en vehículos totales y un 3,2% en cuanto a camiones y tráileres. Al ser 2021 todavía un ejercicio afectado por las consecuencias de la pandemia, las variaciones de la distribución mensual presentan crecimientos importantes entre enero y mayo, un 34% de aumento en febrero como cifra máxima, al ser este periodo de 2021 el que tenía una desviación negativa más elevada con respecto al año 2019. Es a partir del segundo semestre cuando la media mensual apenas varió, entre el 1,9% positivo de julio y el 1,7% negativo de noviembre, debido claro está, a la normalización de la vida con el virus ya en franco declive.

El estudio de las estaciones permanentes de control de tráfico también arroja otro dato interesante comparando las intensidades diarias máximas de vehículos antes y después de la pandemia. Los datos reflejan que el pasado año se dio “una mayor fluidez general en el tráfico y mejora del nivel de servicio” con respecto a la normalidad de 2019.

Durante el pasado año, los kilómetros controlados por la Diputación Foral de Bizkaia en su red viaria sumaron un total de 1.248 compuestos por los 211 kilómetros que componen las carreteras de alta capacidad como autopistas y autovías, que son las más saturadas de tráfico, y los 1.037 kilómetros de las vías convencionales.