Coleccionar es una forma de mantener vivo el pasado. Un patrimonio cultural y social que en su época formaba parte del día a día de las personas y que con el paso del tiempo ha ido perdiendo su sitio. De recuperar su esplendor a través del coleccionismo se encargan en la asociación mungiarra Bitxikiak, que este fin de semana ha organizado, en colaboración con el Ayuntamiento de Mungia, su tradicional feria anual, que ya va por la 19 edición, en el polideportivo municipal y en la zona escolar de Legarda.
“Es un evento que ya está consolidado, la gente nos conoce y tenemos un público fiel que viene todos los años, ya sea para intercambiar objetos, comprar o ver alguna exposición”, destacó Antonio López, presidente de la asociación.
Un evento que vivió ayer su jornada inaugural con un gran ambiente a pesar del mal tiempo y que hoy continuará, además de con una veintena de exposiciones, charlas y conferencias, con una concentración de coches clásicos. De esta manera, en Mungia se exponen multitud de dioramas de Lego y Playmobil, maquetas de tren, casas de muñecas, muestras de pañuelos, perfumes, cajas, globos terráqueos, muñecas, material deportivo, tanques, Exin castillos, modelismo, camiones a escala, molinillos sobre mesa, máquinas de coser, etc. Un sinfín de objetos de diversas temáticas para todos los gustos y públicos divididos por áreas, una de exposición, otra de compra-venta y de trueque.
En este sentido, el recinto deportivo mungiarra se ha convertido este fin de semana en un ferial que alberga auténticas joyas del pasado como, por ejemplo, la colección sobre deportes de Santi Llamas. Aficionado a las antigüedades, un día decidió especializar su colección en el ámbito deportivo para acotar el terreno, aunque tal y como reconoció, “siempre termina yéndose de las manos”. De este modo, a través de internet, regalos y ferias ha ido cincelando durante un cuarto de siglo una colección única que alberga objetos de diversos deportes –boxeo, fútbol, atletismo, ciclismo, tenis, esquí, pelota vasca...– que abarcan desde principios de siglo XX.
Así, por ejemplo, una de las joyas de la corona es una bicicleta estática que tiene asistencia eléctrica de 1930 y que pese a sus cerca de noventa años sigue funcionando a la perfección. “Le tengo mucho cariño, aunque pesa lo suyo y hay que cargar con ella”, comentó Santi. Igualmente guarda con especial mimo una máquina destinada al ejercicio físico, concretamente a la extensión de brazos. “Tiene una historia detrás. Es un objeto que quise adquirir al principio de iniciar la colección, pero para cuando me decidí ya se la había llevado otra persona que tenía una tienda de deportes en Vitoria-Gasteiz. Lo puso en el escaparate y al ir a trabajar me fijaba. Entonces cuando cerró la tienda hace cuatro años se la compré”, rememoró. Objetos de gran valor que expone este fin de semana en Mungia junto a dos cuadros, concretamente, dos bodegones sobre los objetos deportivos de Santi que son obra del pintor Ricardo Renedo. “A él le gustan muchos las antigüedades y a mí el arte. Por eso creo que hacemos un buen tándem”, indicó Santi.
Máquinas de coser
Otra de las exposiciones más destacadas de la feria es la de Luis de Pedro, que posee más de 400 máquinas de coser y una tienda de venta y reparación de estas máquinas en Gernika. En el recinto mungiarra únicamente ha llevado una veintena, pero se encuentran algunas joyas de 1860, 1877 o 1910. “Algunas son para coser medias y otras para zurcir. Llevo coleccionándolas desde 1998 y viajo a por ellas a Alemania, Francia o Inglaterra, entre otros lugares. No soy de comprar por internet”, relató. Actualmente también expone su colección en el museo etnográfico de Orduña y el propio diseñador Cristóbal Balenciaga se interesó por sus máquinas para la serie de televisión que retrata precisamente la época de esplendor del gran modisto vasco.
En la jornada de hoy –de 10.00 a 14.30 horas– las personas aficionadas al automovilismo podrán disfrutar de una nueva concentración de coches clásicos en la que, además de ver vehículos de diferentes tipos, podrán ver un desfile por el municipio con sorteos y regalos para las y los visitantes.
Por último, este evento, que el año que viene celebrará su vigésimo aniversario, es una de las citas más importantes del coleccionismo a nivel de Bizkaia. Todo comenzó con una propuesta al Ayuntamiento para hacer una exposición de colecciones abierta a la gente de Mungia en la que participaron 23 personas y a partir de ahí surgió la asociación Bitxikiak, que cada año ofrece una colección de joyas del pasado.
