Apenas faltan cuatro días para la Nochebuena y la actividad es frenética estos días en Izenaduba Basoa, la casa del Olentzero y Mari Domingi, ubicada en el caserío Landetxo Goikoa de Mungia, el más antiguo de Bizkaia, construido en 1510. A pesar de la intensa jornada de trabajo que se les viene encima para atender todas las peticiones de los niños y niñas, ambos se muestran “tranquilos y sin nervios”, acostumbrados ya a esta rutina cada 24 de diciembre. Su trabajo es uno de los más bonitos del mundo: repartir ilusión y alegría en cada uno de los hogares.

En concreto, este año “además de los juguetes que están de moda”, una solicitud habitual cada Navidad, al carbonero vasco le ha llamado especialmente la atención que muchos pequeños le hayan pedido en sus cartas “herramientas”. Pero, sin duda, si hay algo que le llega profundamente al corazón cuando se sienta a leer las misivas al calor del fuego en su baserri de Mungia son esas peticiones de niños y niñas que le reclaman que reparta “regalos para todos” o que no haya “niños y niñas pasando hambre”.

El caserío Landetxo Goikoa, la casa de Olentzero y Mari Domingi

Sobre esta línea, las visitas de centros escolares y familias de toda Euskadi a este rincón mágico envuelto en mitología se multiplican estos días. Tras dos años en los que la situación sanitaria obligó a adaptar la actividad, este año ha vuelto a recuperar el funcionamiento prepandemia con novedades. Por un lado, se ha renovado la estética del exterior del parque y también se ha mejorado el material, así como las figuras de los personajes que acompañan al carbonero. De esta manera, Basajaun, Tartalo, las lamias, la bruja... ahora son mucho más grandes y también se ha restaurado y ampliado el pequeño pueblo de los galtzagorris, al igual que la cueva de Mari en Anboto.

Koldo Bilbao y Alaitz Erkoreka junto a Mari Domingi y Olentzero

Para estas actuaciones, el Ayuntamiento de Mungia ha realizado una inversión de 600.000 euros. “Para el Ayuntamiento es una apuesta estratégica porque Izenaduba Basoa lo visita mucha gente durante todo el año, no solo en época navideña. Es una seña de identidad”, apuntó la primera teniente de alcalde de Mungia, Alaitz Erkoreka, durante su visita ayer lunes a las instalaciones junto al responsable de Cultura de BBK, Koldo Bilbao, quien a su vez subrayó el compromiso que mantienen “con la cultura vasca y las tradiciones”.

Por último, la temática de este año durante las visitas persigue educar a los visitantes y sensibilizarles en el respeto a la naturaleza y el cuidado del medio ambiente. Una tarea que pone de manifiesto Basajaun al plantear la situación del cambio climático debido a que en Izenaduba Basoa tienen un problema: el color verde ha desaparecido de la casa de Olentzero y Mari Domingi.

Cabalgata

Kalejira. El sábado Olentzero y Mari Domingi partirán desde Landetxo Goikoa a las 16.30 horas y realizarán una kalejira hasta el ayuntamiento de Mungia, donde llegarán sobre las 17.30 horas. Un trayecto que aprovecharán para saludar a los niños y niñas mungiarras, que posteriormente podrán charlar con ambos.

Animación. La bajada mantendrá su formato tradicional, respetando las costumbres. Organizada por centros escolares y distintas asociaciones del pueblo, contará además con todo tipo de atractivos: bueyes, burros, personajes mitológicos, zanpantzarrak, etcétera.