Tres vuelos suspendidos y varios vuelos retrasados en su operativa, tanto de llegada a Bilbao como de salida desde la terminal aérea de Loiu, es el balance del primer día de huelga de los empleados de cabina de la aerolínea Vueling en La Paloma.

Una distorsión de la oferta habitual de la compañía low cost, que es la que más vuelos ofrece a diario en el aeropuerto de Bilbao, alrededor de 40 de media por jornada, y que ayer martes afectó a varios centenares de viajeros que tenían que volar tanto a destinos domésticos como extranjeros. De forma preventiva “y con el objetivo de proteger a sus clientes”, la aerolínea canceló con anterioridad 54 vuelos no protegidos por los servicios mínimos previstos para ayer martes, de los 520 previstos a nivel de todo el Estado. Bilbao se quedó sin dos de los vuelos matutinos que procedían de Barcelona, el de las 8.15 y 10.20 y el que conecta con el aeropuerto londinense de Gatwick que llegaba a 11.30 horas.

A los que habían reservado plaza en estos vuelos, la compañía ya les avisó días atrás de su suspensión dándoles alternativas a sus destinos. Algo que, según denunciaron algunos viajeros, no hizo con el vuelo de vuelta a Londres. La compañía explicó ayermartes que “el 74 % de los clientes afectados por estas cancelaciones ya ha sido reubicado”, al tiempo que “el 26 % restante ha solicitado bono o reembolso o está pendiente de elegir la opción que más le convenga”.

Más se notó la huelga de tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) en los retrasos que sufrieron varios vuelos procedentes de destinos como Palma de Mallorca o Sevilla. También el vuelo con destino a Gran Canaria, finalmente despegó pero con una demora de dos horas.

A pesar de todo esta situación, desde la aerolínea low cost del grupo IAG indicaron que las incidencias apenas habían sido importantes al mediodía de ayer martes. Fuentes de Vueling especificaron por la tarde como “todos los vuelos previstos por Vueling han operado sin incidencias”. Es más aseguraron que “la puntualidad ha sido del 93,3% en el aeropuerto de Barcelona y del 92,02% en toda la red”. Lo ocurrido para ayer martes es una piedra de toque para la dirección de Vueling si no quiere que las buenas cifras que lleva de ocupación a lo largo de este ejercicio 2022 se desploman por efectos de los paros parciales que han sido convocados dentro del personal de cabina.

El sindicato Stavla, mayoritario entre los TCP de Vueling, seguirá con las jornadas de paro convocadas para todos los viernes, domingos y lunes de este mes de noviembre, diciembre y enero, además de los días 6, 8, 24 y 31 de diciembre; y 5 de enero. Es decir, los días en que más reservas tiene realizada la aerolínea con base en Barcelona por lo que las negociaciones entre ambas partes son inevitables, sobre todo desde el punto de vista de los miles de clientes que tienen cerradas sus reservas para los días festivos y vacaciones navideñas.