Se le va a dar la vuelta como si fuera un calcetín al tratamiento primario de las aguas que se depuran en la estación de Galindo. Y hacia falta ya que la tecnología con la que se limpian las aguas fecales de más de un millón de vizcainos, originaria de los años 80, se estaba quedando obsoleta.

Este martes, la sociedad estatal Aguas de las Cuencas de España (ACUAES) ha aprobado la firma del convenio que permitirá la ejecución y explotación de las obras de renovación y mejora de las instalaciones asentadas en Sestao, lo cual le permitirá también cumplir con más celo las condiciones de vertido exigidas por la Unión Europea.

Un acuerdo que supone poner encima de la mesa alrededor de 38 millones de euros para ejecutar unos trabajos que se van a prolongar durante casi cuatro años una vez sean adjudicados a finales de este año o principios del que viene. ACUES también ha autorizado este martes los pliegos para la licitación del contrato de ejecución de los trabajos por un monto de 34.614.689 euros, a los que luego se sumarán 3,5 millones más de otras partidas hasta sumar los 38 millones de euros referidos.

"Es una gran noticia", asegura el director gerente del Consorcio de Aguas Bizkaia (CABB), Pedro Barreiro, poco después de salir del comité directivo donde el ente también diera luz verde a la firma del convenio.

Este acuerdo es consecuencia de la enmienda 128 a los Presupuestos Generales del Estado del 2022 presentada el año pasado por el grupo parlamentario del PNV y aprobada por el Congreso.

Con ello se consigue finalmente que desde Madrid cumplan con una obligación que data del año 2010 cuando el Gobierno central determinó que estas obras eran de interés general y debían ser asumidas por el Estado. Aunque aprovechando la actual situación económica, y gracias a Bruselas, la intervención le va a salir casi de balde a las arcas del Estado.

Según indican en un comunicado fuentes de la delegación del Gobierno en Euskadi, los 38 millones de euros serán cofinanciados en un 80% por los fondos Next Generation de la Unión Europea en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El 20% restante será financiado mediante aportaciones del Consorcio de Aguas durante la construcción de las obras.

Pedro Barreiro ha indicado a este periódico que "a falta de conocer definitivamente el presupuesto concreto de las obras tras ser licitadas, los cálculos con los que trabajamos es que el Consorcio aportará al final entre 6,5 y 7 millones de euros".

Los objetivos que se pretenden alcanzar con esta intervención son aumentar la capacidad y el rendimiento del tratamiento primario que evite el vertido de agua no tratada al cauce. Además, permitirá mejorar la calidad del agua que se vierta en las épocas de lluvia intensa.

Los técnicos de ACUES y el CABB están trabajando desde hace meses en los pliegos de condiciones de las modernización de Galindo con unos sistemas de tratamiento primario de agua muchos más modernos que los que se utilizan en la actualidad.

Pedro Barreiro asegura a DEIA que "con este proyecto vamos a poder tratar mejor el agua y de una forma más eficiente". También supondrá acabar con los problemas de malos olores que vienen padeciendo desde hace años los vecinos de Sestao y Barakaldo que viven en torno a las instalaciones, algo en lo que el Consorcio de Aguas ya viene trabajando desde hace unos años con inversiones propias.

Y todo ello además "ocupando menos espacio físico en la planta", apostilla Barreiro debido a que se reducirán parte de las estructuras de las instalaciones a renovar. Ello permitirá ganar una hermosa parcela dentro del recinto de la planta depuradora para futuras necesidades del Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia. Desde su construcción, que se realizó en dos fases, la planta ha sufrido modificaciones hasta llegar al momento actual, en el que se ha saturado la superficie utilizable de la parcela, lo que impide las necesarias ampliaciones que continuamente se necesitan.