“Durante todos estos años, uno de los deseos de Conchi Fernández fue ver el cadáver de su aita y demostrar que fue un disparo de la Policía Armada lo que acabó con su vida. Ese día llegó. El 24 de mayo de este año, un equipo de profesionales del Departamento de Antropología de la Sociedad de Ciencias Aranzadi procedió a la exhumación y se certificó la causa de su muerte: una herida de bala en la región frontal izquierda del cráneo. Además, pudo comprobarse que a Antón Fernández le practicaron una autopsia en la que se le fue extraída la bala”.

Este es uno de los párrafos del libro Erandio, una herida abierta, que profundiza en los hechos acaecidos en el municipio en 1969: las conocidas como las movilizaciones del gas. En unas protestas del 28 y 29 de octubre, contra la contaminación de las fábricas, Antón Fernández, primero, y Josu Murueta, en un segundo día y ya con una huelga general convocada, fueron abatidos por la policía franquista. Antón falleció después de quince días en coma. A Josu Murueta lo mató una herida en el abdomen. “Desgraciadamente, las víctimas de Erandio van a tener un acceso a la verdad parcial. En este libro, se recogen todos los datos de archivos militares, estatales, etc. a los que se ha tenido acceso, pero, aun así, se nos han cerrado las puertas en algunos archivos. Sabemos quién disparó a ciertas personas pero a otras no. Sabemos quién era el gobernador civil, quién era la alcaldesa de Bilbao, quién llevaba el operativo esos días… pero todavía se podrían conocer muchos más datos. El problema es que hoy tenemos una ley de secretos oficiales y de memoria histórica que nos impiden llegar a toda la verdad”, reconoce Javier Buces, el autor de esta investigación, que también recopila los testimonios de familiares de Antón y de Josu, así como de testigos. “Hace dos años, celebramos el 50 aniversario de estas movilizaciones. Fue un momento muy emotivo y en el que quisimos hacer justicia a nuestro pequeño nivel y hacer un reconocimiento importante a las personas que sufrieron y, más aún, a las personas que perdieron su vida por la defensa de unos principios. Queríamos que todo eso quedara documentado. Por eso, fue voluntad de toda la corporación municipal sacar una beca de investigación, que ganó Javier Buces y que da como resultado este libro”, explica la alcaldesa erandioztarra, Aitziber Oliban.

El historiador de Aranzadi ha dedicado estos dos años a rebobinar para recopilar todo lo sucedido, ubicarlo en su contexto y hablar con los familiares y compañeros de los asesinados. Como Conchi, la hija de Antón Fernández, o Pilar Arenaza, la viuda de Josu Murueta. “Hay que destacar el ímpetu que han puesto en que se recuerde y se reconozca a sus familiares. Muchas veces, el cansancio de las víctimas hace mella y nos encontramos a víctimas que han desistido. Pero ellas han estado al pie del cañón reclamando justicia y verdad”, destaca el investigador.

Énfasis Por otra parte, hay dos cuestiones que, de manera especial, le han llamado la atención. “Para mí, hay dos factores superimportantes: por un lado, la movilización de las mujeres. Aquí las primeras son ellas, que bajan a la plaza del ayuntamiento a protestar porque sus hijos enferman y se mueren. Nunca se le ha dado la importancia que merece a esa movilización. Cuando hablamos de la oposición al franquismo es una historia de hombres, siempre. Aquí tenemos un ejemplo de que las mujeres son las que empiezan a movilizarse”, asegura Buces. El segundo hecho al que alude es a que ese rechazo y el grito de “¡Gases no!” es pionero desde el punto de vista ecológico. “Las movilizaciones contra la contaminación son en un momento en el que no existían grupos ecologistas. Empiezan aquí en Erandio y para todos los grupos que han venido después, el municipio es un referente en la lucha contra la contaminación ambiental”, valora Buces.

Erandio, una herida abierta estará disponible en PDF en la web del Ayuntamiento, así como en bibliotecas, colegios y “otros medios que puedan ayudarnos en su difusión, para que esta historia se transmita de generación en generación”, como señaló la primera edil.