La Diputación Foral de Bizkaia ha abierto expedientes a dos residencias de mayores del territorio histórico, que pudieran concluir con la interposición de una sanción, tras las inspecciones llevadas a cabo en estos centros para comprobar si cumplían con las instrucciones sanitarias motivadas por la COVID-19.

El diputado foral vizcaino de Acción Social, Sergio Murillo, ha informado a petición propia en comisión de las Juntas Generales de Bizkaia de los planes de inspección en residencias en la actual crisis sanitaria y ha explicado, por otra parte, que se ha iniciado la reanudación progresiva de los servicios sociales suspendidos debido al COVID-19.

Murillo ha señalado que se empezaron a realizar inspecciones en las residencias con personas positivas en coronavirus el 30 de marzo y ha admitido que en una primera fase "a duras penas" los trabajadores contaron con equipos de protección adecuados, "aquí y en toda Europa", ha puntualizado.

Los trabajadores han reutilizado equipos o han usado elementos "no homologados", ha reconocido el diputado, quien ha asegurado que desde el 7 de abril los centros cuentan con "material de protección suficiente".

Murillo también ha evidenciado "dificultades" en un primer momento en la correcta "zonificación" en las residencias para separar a los usuarios contagiados de los que no lo estaban ya que inicialmente sólo se hacían test para detectar el virus a quien presentaba síntomas, pudiendo ser muchos asintomáticos positivos causantes de la transmisión del coronavirus.

Asimismo, ha puesto de manifiesto dificultades para mantener el aislamiento de mayores afectados, al dificultar la puerta cerrada de sus habitaciones la cobertura de sus necesidades.

En el marco de las inspecciones realizadas entre el 30 de marzo y el 15 de mayo en dos fases, ha detallado que los inspectores han hecho dos visitas en 18 centros, así como tres visitas en una residencia y cuatro en otra hasta comprobar que se habían cumplido todas las indicaciones sanitarias y de medidas de seguridad.

Murillo ha precisado que se ha abierto expedientes en dos casos, sin citar las residencias afectadas, y no ha descartado que tales actuaciones concluyan con una sanción a esos centros.

En la actualidad, se está en una tercera fase en materia de inspecciones, que son de carácter más preventivo y de forma conjunta entre Acción Social de la Diputación y Salud del Gobierno vasco ante un posible brote del virus tras mejorar la situación inicial. Según los datos aportados, hay 108 personas afectadas en residencias vizcainas por la COVID-19.

Murillo ha destacado, asimismo, la "satisfacción" entre las familias respecto al plan puesto en marcha durante el confinamiento para comunicarse con sus familiares residentes, con aporte de información por parte de los centros cada 48 horas y realización de videollamadas cada 5 días, al menos.

Su departamento ha inspeccionado el cumplimiento de este plan mediante llamadas telefónicas a familiares en tres fases, en las que el grado de satisfacción entre los allegados ha ido en aumento hasta alcanzar un grado alto del 91,7 % entre las 170 entrevistas a familiares de usuarios de todas las residencias. Sólo el 0,5 % afirmó tener un grado de satisfacción bajo.

En la misma comisión, el diputado ha explicado la desescalada en su departamento con actuaciones, como el reinicio de las visitas a las residencias de mayores.

Ha señalado que el departamento trabaja en la restauración progresiva de los servicios sociales, en un contexto de freno en la expansión del COVID-19 -no hay afectados ahora en centros de menores ni de discapacidad dependientes de la Diputación-, aunque el virus "sigue presente", ha advertido.

Asimismo, han comenzado las visitas a centros de menores, a menores en acogimiento familiar o en puntos de encuentro y desde el 11 de mayo se han reactivado las valoraciones de situaciones de dependencia -realizadas ya 1.079 valoraciones-.

Se han puesto en marcha también 28 centros de atención diurna, 25 centros ocupacionales y algunos centros de día -los vinculados a residencias quedan pendientes para una fase posterior-, entre otros servicios.