YA lo anticipaba Pablo Olmos en la felicitación navideña que transmitió a los lectores junto al resto de galardonados en los Hemendik Sariak Enkarterri de 2019 en el suplemento comarcal de diciembre, cerrándola con un valioso consejo: "Contaros que seguiremos ascendiendo montañas, en esta ocasión va a ser el Ama Dablam. Valorad lo que tenéis, aprovechadlo y no esperéis a perderlo".

El vecino de Zalla aquejado de ELA vuelve a hacer gala de su fortaleza implicándose en otra aventura después de coronar el monte Vinson de la Antártida en 2018. No está dispuesto a permitir que la enfermedad le impida subir a la cumbre del Ama Dablam animando desde Enkarterri los progresos de su amigo Unai Llantada. Y es que el proyecto solidario Dar Dar regresa con destino Nepal, donde partirá la expedición el próximo 16 de octubre.

El martes dará a conocer los detalles de este segundo desafío en un acto que acogerá el aula de música Andrés Isasi de Las Arenas desde las 19.30 horas con entrada gratuita. La presentación en Getxo tiene su razón de ser en la incorporación a la iniciativa de la asociación Dale CandELA. El colectivo surgió hace cuatro años cuando a uno de sus componentes le diagnosticaron la enfermedad y rápidamente se movilizaron para reunir fondos que promuevan el estudio de esta dolencia degenerativa y de momento incurable. Lo hacen por medio de donaciones, organizando eventos y poniendo a la venta de productos de merchandising en su tienda.

Los dibujos que reproducen son obra de Jaime Lafita, diagnosticado de esclerosis lateral amiotrófica, que se convertirá en una de las caras visibles de la expedición de Unai Llantada en otoño. "Conocí la historia de Pablo Olmos" y a partir de ahí se gestó su colaboración, según explica él mismo en el vídeo que anticipa la colaboración. El propio Pablo estará presente. "Yo también participo en compañía de Jaime y las personas que se quieran unir a nosotros, pero pasaré menos por las redes sociales porque cada vez me encuentro con más limitaciones y me cuesta mucho comunicarme, la ELA está haciendo muy bien su trabajo", señala el zallarra sin perder el sentido del humor. No obstante, "como buen previsor voy grabando audios que escucharéis en su momento".

Desde el Kilimanjaro Deportista empedernido, sintió la debilidad que entonces achacó al esfuerzo y enmascaraba los primeros síntomas de la enfermedad hace siete años mientras subía al monte Kilimanjaro.

Se había embarcado en un viaje con Unai Llantada para cubrir con él parte del desafío con el se propuso escalar las siete cumbres que considera el alpinismo: además del Kilimanjaro, 5.895 metros (África), Aconcagua, 6.962 metros (América del Sur), Denali, 6.195 (América del Norte), Elbrus, 5.642 metros, (Europa), Everest, 8.850 metros (Asia) la Pirámide de Carstenz, 4.884 metros (Oceanía) y el Vinson, 4.897 metros (Antártida)

Cuando solo le restaba esta última cima, Unai empezó a darle vueltas a la idea de unir el alpinismo y la visibilización de la dolencia que padece su amigo. Pablo enseguida aceptó entusiasmado y juntos perfilaron Dar Dar ELAntártida, que se puso de largo en el Zalla Zine Antzokia con padrinos de excepción, como los alpinistas Alex Txikon, Juanjo San Sebastián y Juanra Madariaga. El nombre elegido tampoco fue casual. "Alude a que en euskera significa temblar, otro de los signos de la ELA", indicaron.

Desde su casa de Zalla, Pablo alentó a Unai en cada paso por el continente helado y narró sus avances en vídeos que se emitieron por Facebook. La ansiada cumbre lograda en diciembre de 2018 representó el momento álgido que se vivió con emoción desde Enkarterri. Instantes recogidos en un documental que se proyectó por primera vez en el palacio Euskalduna hace justo un año ante una nutrida representación institucional encabezada por la diputada de Cultura, Lorea Bilbao.

El audiovisual ha trasladado la historia de Pablo por distintos auditorios, incluyendo el prestigioso certamen de cine de Valladolid, la Seminci y el premio comarcal del festival de cortometrajes internacional, Enkarzine, "y continuamos proyectándolo allí donde nos lo soliciten", asegura Unai Llantada con determinación. Entre tanto, la expedición Dar Dar evolucionó hacia una asociación con entidad propia y vocación de continuidad.

20.000 euros donados Nunca han dejado de reunir fondos que contribuyan a dar visibilidad a la ELA al mismo tiempo que se aporta un mensaje de esperanza apostando por el trabajo de profesionales que permita hacerle frente algún día: "Después de donar 20.000 euros a la Fundación Francisco Luzón seguimos adelante".

La valiente lucha del banquero contra la ELA ha hecho de él otro de los referentes en la divulgación de la esclerosis lateral amiotrófica. La cuantía entregada desde Zalla "se destinará íntegramente a la investigación a través del proyecto que desarrollamos en colaboración con la Fundación Bancaria la Caixa", según comunicaron desde la fundación al recibir el cheque conmemorativo. Gracias a esta línea de actuación "se está profundizando en la contribución de una nueva familia de lípidos en ratones con ELA para encontrar nuevas terapias y frenar la progresión de esta enfermedad". Representa "una muestra más de que la comunidad de la ELA en España se afianza cada día con el apoyo de las asociaciones regionales, como Dar Dar, en todo el país trabajamos de manera conjunta y, por tanto, más eficiente por la mejora de la calidad de vida de las personas afectadas y conseguir una cura", concluyen.

A los impulsores de Dar Dar ya les rondaba la inquietud de ascender otro peldaño pronto. "Seré sincero, hemos albergado dudas", confiesa Pablo Olmos. Sin embargo, "queríamos ser todavía más ambiciosos intentando hollar la montaña que siempre he soñado con coronar, considerada la mas bonita de la tierra, el Ama Dablam, en el Himalaya a 6.812 metros de altitud y apodada el collar de la madre".

Unai prevé volar a Nepal el 16 de octubre, donde permanecerá "un mes, subiendo también el Island Peak" y con el mismo formato de la expedición a la Antártida, con las crónicas desde Zalla y Getxo de Pablo Olmos y Jaime Lafita respectivamente y un documental como broche de oro. En la tienda de deportes Demobike de Zalla ya se han puesto a la venta sudaderas, paraguas, tazas y pulseras para contribuir con la causa.

"Quizás te preguntes; ¿por qué seguir adelante? No puedo dejar de escalar montañas, aunque mi cuerpo me lo impida, mi cabeza las sigue buscando y te diré una cosa, las encuentra", mantiene firme Pablo Olmos.