Bilbao - Barakaldo contará con su Abandoibarra particular para el año 2023. Un gran espacio de uso urbano ubicado en el rectángulo delimitado por los bajos del puente de Rontegi, la nueva avenida de Altos Hornos, la dársena de Portu y el cauce de la ría, que acumula nueve hectáreas de terreno similar a la superficie que se expande entre el Museo Guggenheim y el Palacio Euskalduna en Bilbao.

La alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, y el director de Bilbao Ría 2000, Ángel Nieva, anunciaron ayer, en el mismo lugar a reconvertir, la decisión tomada el lunes por la sociedad vasco estatal por la que en el plazo de un mes aproximadamente licitará un concurso de ideas para determinar los usos de este gran paralelepípedo ahora colonizado por miles de plumeros de la pampa.

Del Campo indicó que “con este nuevo espacio el centro de Barakaldo va a llegar por fin hasta la ría” y concretó que “así recogemos esa demanda de nuestros vecinos y vecinas que piden una zona de ocio y deporte, de disfrute con la familia y los amigos, con espacios novedosos y donde se podrá disfrutar de actividades acuáticas en nuestra ría”.

El objetivo de este concurso es definir esos espacios buscando un diseño integral, que sea coherente con lo ya ejecutado y que aporte valor al resto de la ciudad, acogiendo las demandas actuales de usos específicos en el entorno urbano. Además, el gran parque que surja solventará la barrera que supone en la actualidad el trazado ferroviario de forma que todo el municipio tenga un acceso directo a su zona más baja.

El diseño de la parcela se diferencia en dos mitades divididas por una línea diagonal. Una de estas áreas, la que linda con la orilla de la ría, tendrá un composición definitiva en el proyecto y la segunda, la pegada a la avenida de Altos Hornos, tendrá la posibilidad de que, sobre lo que se construya, pueda evolucionar a otros usos de ocio, recogidos en el Plan General de Barakaldo, que puedan ser promovidos por un empresario privado. “Como no podemos esperar a hacer todo, y ya han pasado demasiados años, vamos a cambiar el paso haciendo la obra y que esa parte pueda quedarse como se diseñe o pueda variar si en un futuro hay una propuesta privada de interés”, detalló el responsable de Ría 2000.

Según explicó Nieva, el concurso se licitará en el plazo de un mes y constará de dos fases. En la primera estará abierto a todos aquellos equipos de profesionales que quieran presentarse para plantear sus diseños. Unos grupos multidisciplinares que tendrán incluido, según concretan las bases, “un sociólogo urbano para que analice las necesidades reales de este espacio”, apostilló. Un jurado compuesto por ocho componentes, miembros de las instituciones responsables y de los colegios de arquitectos e ingenieros de caminos, canales y puertos, seleccionarán entre cinco y ocho de las propuestas presentadas y compondrán la segunda fase del concurso. Los elegidos contarán con dos meses, hasta mediados de noviembre, para presentar su propuesta más afinada que será examinada de nuevo por el jurado. La idea es que para la Semana Santa del próximo año se dictamine el equipo ganador.

El premio serán los honorarios de alrededor de 450.000 euros que recibirán por redactar ya el anteproyecto constructivo y posteriormente la dirección de obra del parque ribero. Con todo ello, Ría 2000 sacará a concurso la ejecución de los trabajos por un montante en total de unos cinco millones de euros “y con la idea de que estén concluidos a lo largo del año 2023”, concretó Nieva.

En el concurso de ideas también se incluye la actuación en la franja ribereña que bordea la dársena de Portu y los terrenos hasta llegar hasta el puente nuevo que pasa por el río Galindo hacia Sestao. Con todo ello “traeremos a Barakaldo esa visión metropolitana en la que hemos trabajado en Bilbao donde la ría es el eje de las actividades”, concluyó el responsables de Ría 2000.