BILBAO. Este sábado se detectó una fuga de agua en el pabellón Allende del centro hospitalario bilbaíno que afectó a la unidad de Hemodinámica, y mojó varios de sus elementos, especialmente la sala de control.

A partir de ese momento se evaluó la situación con el servicio de Cardiología, Emergencias y con la jefatura de guardia, quienes hablaron a su vez con los responsables del Hospital Universitario de Cruces para la derivación de los pacientes que necesiten de este tipo de tratamiento.

En un comunicado hecho público este lunes, la dirección del hospital bilbaino asegura que el agua ha afectado "únicamente a las paredes y techo" de la citada unidad, elementos que, según indica, se restaurarán con "rascado, secado y pintura" entre este hoy y mañana.

Además, afirma que, tras la inspección del equipo de hemodinámica, se ha comprobado que este "no se ha visto afectado por el agua", pero "hasta adecentar la sala no se pondrá en funcionamiento". Por esta causa, hasta el miércoles no se atenderán pacientes que requieran de este tipo de tratamientos. Desde que se iniciara la incidencia y hasta hoy, se ha trasladado a seis pacientes.

En este sentido, ha recordado que la dirección de la OSI Bilbao Basurto se ha coordinado con otras organizaciones "para atender a los pacientes con la seguridad necesaria en estos casos".

Por ello, ha agradecido su cooperación, así como la del personal asistencial, limpieza y del servicio de mantenimiento "que han participado en las diferentes tareas para poder agilizar la puesta en marcha de la sala de Hemodinámica".