Bilbao - Dos mujeres fueron asesinadas en las últimas 48 horas en la localidad valenciana de Alboraya y la onubense de Ayamonte presuntamente a manos de sus parejas o exparejas, dos nuevos casos que elevarían a 1.000 las víctimas mortales de violencia machista, de ser confirmados por el Gobierno. Las mujeres de Valencia y Huelva situarían en 25 las víctimas mortales de la violencia machista en lo que va de 2019. Además, continúa en investigación el caso de la paraguaya Romina Celeste, asesinada en Lanzarote a principios de año.

El último caso se produjo ayer en Alboraya, donde una mujer de 29 años fue hallada muerta con heridas de arma blanca por la Policía Local, que acudió a la vivienda tras ser alertada de que no había acudido a su puesto de trabajo. Cuando los agentes trataban de entrar a la vivienda, la pareja de la mujer, de 48 años, se lanzó al vacío desde el balcón y murió en el acto. El presunto autor del crimen tenía autolesiones en la muñeca y se habría clavado un cuchillo en el pecho antes de saltar.

Por su parte, desde el pasado sábado la Guardia Civil investiga otro posible caso de violencia de género en Ayamonte, donde un matrimonio fue hallado muerto en su domicilio. Los agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil apuntan a la violencia de género como principal hipótesis. La pareja hallada muerta, de nacionalidad cubana y que dejó un huérfano de 4 años, estaba en trámites de separación. La mujer tenía 45 años y él, 53. De confirmarse la naturaleza de género de estos crímenes, serían 1.000 las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas desde que en enero de 2003 comenzaron realizarse las estadísticas oficiales.

En lo que va de año, quince menores han quedado huérfanos por la violencia machista, 245 desde 2013, cuando este dato comenzó a ser registrado en las estadísticas. En 2019 fue asesinado un menor, el niño alemán que murió a manos de su padre en Canarias.

Dispara a sus cuñadas Por otra parte, un hombre mató el domingo por la noche en Aranjuez a una de sus cuñadas con una escopeta de caza, hirió de gravedad a otra cuñada, que permanece en estado crítico, y a su suegra, que también se encuentra hospitalizada por una herida en la pierna. El presunto agresor, de 38 años y con numerosos antecedentes penales, fue detenido tras haber permanecido atrincherado durante varias horas en el interior de su vivienda, informaron fuentes policiales, que apuntan a un posible móvil sentimental. El autor de los hechos cogió una escopeta de caza y comenzó a disparar desde la ventana de su vivienda contra su familia política, que estaban en la calle. - Efe/E. P.