Bilbao - 2018 probablemente sea un año difícil de olvidar para el BEC. La celebración de la gala de entrega de los premios EMA de MTV y una Bienal de Máquina-Herramienta “espectacular” han catapultado a la infraestructura ferial a un ejercicio de récord. El impacto económico que generó en 2018 alcanzó los 134,7 millones de euros, el más alto desde su puesta en marcha hace ahora quince años, y, por primera vez en su historia, alcanzó un beneficio de dos millones de euros. “Se intuía que iba a ser un ejercicio bueno pero ha sido mejor de lo que esperábamos; un año de récord, no solo por el impacto económico, sino también por la actividad en sí”, se congratulaba el director general del BEC, Xabier Basañez.
La actividad desarrollada el año pasado en los pabellones de Barakaldo generó un impacto económico de casi 135 millones de euros, muy por encima de los 92 computados a lo largo de 2016, el último ejercicio en el que se celebró la Máquina-Herramienta y, por lo tanto, comparable en términos de actividad. La mayoría de este impacto, además, en concreto 85,6 millones, se produce en actividades externas y repercute en sectores y actividades no directamente feriales, como hostelería (56,1 millones de euros), transporte (18,2 millones), actividades recreativas y culturales (6,2 millones) y comercio al por menor (3 millones). Es decir, son estos sectores los grandes beneficiados de la buena marcha del BEC. En cuanto a quién genera este gasto, se reparte casi a partes iguales entre expositores y organizadores (el 52,9%) y visitantes (el 47,1% restante).
La actividad del recinto también ha tenido su reflejo en otros ámbitos, como la recaudación vía impuestos de 16,8 millones de euros o la creación de 2.754 puestos de empleo. Además, el BEC ha alcanzado por primera vez tras la crisis un beneficio económico de 2 millones de euros, a falta de cerrar definitivamente el año, una cifra muy superior a los 1,2 millones en positivo en la cuenta de resultados esperada para el ejercicio y los 250.000 euros en positivo alcanzados en 2016, cuando se abandonaron los números rojos por primera vez tras la crisis. “No es solo impacto y actividad; los números refrendan la puesta en marcha del plan estratégico”, destacó Basañez. El espacio retoma así la senda de crecimiento, después de tres años del plan de choque puesto en marcha en 2013 con el objetivo de nivelar y contrarrestar su cuenta de resultados, muy afectada por la puesta en marcha de las instalaciones y los efectos de la crisis económica.
Las dos principales razones para este salto cuantitativo tan importante han sido, según explicó el propio director general del BEC, por una parte, una edición de la Bienal de Máquina-Herramienta “espectacular” y, por otra, la celebración de la gala de entrega de los premios EMA de la multinacional MTV el pasado noviembre, que llegó a 500 millones de espectadores y reunió sobre el escenario a artistas de la talla de Camila Cabello, Nicki Minaj, Janet Jackson, Marshmello o Rosalía. “Fue un montaje espectacular que nunca se había visto aquí, con miles de personas trabajando quince días antes del evento y la gala en sí con todos sus invitados, que tuvieron que estar unos días entre nosotros”, explicó Basañez.
Solo 87 días sin actividad La actividad en los pabellones de BEC ha experimentado un notable incremento en los últimos años, según detalla la memoria de actividad relativa a 2018 hecha pública ayer por el recinto. El ejercicio pasado, sus instalaciones acogieron 206 eventos de distinta índole, un incremento importante comparado con los 164 de 2014 o los 188 de 2016. Esos certámenes -ferias, convenciones, conciertos...- supusieron 278 días de ocupación de los pabellones: 187 de jornadas de celebración propiamente dichas, a las que hay que añadir otras 91 imprescindibles de montaje y desmontaje. Al final, el recinto estuvo vacío solo 87 días, una cifra muy significativa teniendo en cuenta que la actividad feria, congresual y de espectáculos prácticamente desaparece durante los meses de verano y en enero, con lo cual se eliminan de forma oficiosa del calendario prácticamente noventa días. “Nunca se podría alcanzar el 100% de ocupación: hay un parón de sesenta días en verano, del 15 julio al 15 de septiembre, cuando no se celebran ferias y los conciertos son al aire libre, y otro en enero, hasta que remonta la actividad tras la Navidad”, explica Xabier Basañez.
También fue un año de récord, tanto de visitantes como de ocupación, para el Bizkaia Arena, su gran pabellón multiusos, con 27 eventos y más de 240.000 espectadores que asistieron a los conciertos de Judas Priest, Thirty Seconds to Mars, Berri Txarrak, Shakira, Fito & Fitipaldis o Ara Malikian, entre otros, además de eventos deportivos como el Super Enduro GP Euskadi o la Gala Internacional de Gimnasia Euskalgym, y espectáculos infantiles como Soy Luna.