“La experiencia del euskera nos sirve para adaptar al mapuzugún”
Paula, Álvaro y Catalina son tres mapuches que buscan recursos en Amorebieta para recuperar su lengua
Amorebieta - Paula, Álvaro y Catalina forman parte de la asociación Mapuzuguletuaiñ, una agrupación que lucha por recuperar su lengua, el mapuzugún. Estos mapuches pasan estos días en el barnetegi cogiendo ideas para seguir luchando por recuperar su lengua. Y es que este grupo de profesores se refleja en el euskera y en el desarrollo que se ha aplicado en Euskadi para conseguir que la lengua vasca esté en el lugar que se merece, con una implantación social cada día más alta y con el reconocimiento institucional que le corresponde.
Ellos buscan seguir los mismos pasos para que su lengua minoritaria, situada entre Chile y Argentina, pueda conseguir el mismo estatus que el euskera. Paula es la segunda vez que llega a Bizkaia, el pasado mes de noviembre estuvo unos días en Durango y confiesa “su debilidad por el proceso lingüístico que se ha llevado en Euskadi”. Señalan que “para nosotros, la experiencia del euskera es importante y enriquecedora, porque nos ha servido para plantearnos nuestra postura con respeto a nuestra lengua”. Así señalan que, gracias a una subvención de Garabide, asociación que apoya la recuperación de las lenguas minoritarias, han podido venir a Euskadi para coger recursos e implantarlos en su país. “Esto es bueno para nosotros para saber cómo enseñar. Cogemos ideas para proyectarlos en nuestra tierra, sobre el enfoque comunicativo, dinámicas en la enseñanza?”, explica Paula. Aunque reconocen que su lengua está avanzando, se muestran preocupados “porque los niños no hablan mapuzugún , nuestra lengua no tiene espacio y necesitamos recuperar la comunicación para que pueda pasar de padres a hijos”.
Estarán en Amorebieta durante dos semanas; en una serán alumnos y en la otra observarán el papel de los profesores. “Conocía un poco el euskera de gente vasca que vive en Temuco. Es muy distinto a nuestro idioma pero conociendo cómo se van generando las frases, puede tener algún parecido al mapuzugún ”, confiesa Catalina. “Conocemos a un hombre vasco que fue a vivir allí y se interesó por aprender nuestra lengua”, añaden.
Llevan pocos días en Euskadi pero se atreven ya a decir algunas cosas en euskera como “ eskerrik asko, gabon, agur, mesedez, ni Catalina naiz”. Se sienten muy agradecidos por todas las personas de Euskadi que se han implicado para que ellos hayan podido sufragar los gastos, gracias a una beca. “Acabamos de venir, pero en breve tienen previsto venir otras dos personas de nuestra asociación para seguir trabajando y conociendo las metodología del euskera”, añade Paula.
Estos tres profesores aprovechan sus momentos libres para conocer rincones de Bizkaia, como Amorebieta, Durango o Elorrio y el próximo 16 de julio acudirán a Gasteiz, al segundo encuentro de jóvenes hablantes de lenguas minorizadas. -A. Salterain