Bilbao - En breve dejará la presidencia de la delegación vizcaina del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco Navarro, pero el legado de Jesús Cañada perdurará con el Urban Regeneration Forum que en unos años aspira a que pueda replicar la repercusión internacional de la Bienal de Arquitectura de Venecia. En su tercera edición, en la que celebrarán un congreso científico los días 20, 21 y 22 en junio en el Bizkaia Aretoa, pondrán el acento en la relación entre la economía productiva y el tejido urbano.
Durante el foro se hablará de cómo los planes de regeneración han excluido la economía productiva del panorama urbano.
-En el caso de Bilbao, cuando el Puerto se traslada a la periferia del centro de la ciudad, quedan vacíos. La ciudad es un juego de vacíos, aunque los edificios son construcciones con volumen, pueden estar huecos, y siguen siendo vacíos; igual que los vacíos que va dejando la industria. Hablaremos de cómo recomponer esos vacíos y de si se pueden recuperar parte de esos edificios que han pertenecido a la historia para otros usos.
Reutilizar lo que ya existe.
-Está relacionado con la regeneración y la sostenibilidad, son conceptos muy parecidos. Es decir, no derribar para construir de nuevo cuando los edificios tienen años de vida y están bien situados, aunque haya cambiado el uso por las circunstancias que sean.
Bilbao tiene ejemplos de que así se ha hecho, como la antigua Alhóndiga, reconvertida hoy en Azkuna Zentroa.
-La Alhóndiga se derribó en parte y se hizo un edificio nuevo, aunque es un buen ejemplo. Como se ha reconvertido todo el Euskalduna porque había que sacar más lejos la industria naval y no había tanta demanda. Hay mucho edificio que se puede regenerar y readaptar. De hecho, en el centro de las ciudades, cada vez más. Tenemos tan buena arquitectura en el Ensanche bilbaino que los edificios van a durar otros 100 o 150 años, aunque haya que hacer reconversiones.
En este sentido, Zorrotzaurre es una oportunidad inigualable dentro de la ciudad.
-Sí. Bilbao no tiene vegas y suelos llanos como Zorrotzaurre para hacer un nuevo barrio o distrito, que tenga además la conexión que tiene con la ría. El futuro de Bilbao y de su área metropolitana pasa por la ría, será el pulmón de la riqueza paisajística económica y política de Bilbao y de Bizkaia.
Hasta hace pocos años prevalecía la industria; ahora cada vez se escucha más el concepto de industrias creativas. ¿Hasta qué punto incide en la arquitectura que la economía productiva esté cambiando?
-La arquitectura se va adaptando a las necesidades de las personas. Tiene una evolución un poco más lenta que las Ciencias de la Información o la Comunicación. Habrá que reconvertir los trabajos, ya que la digitalización es otra revolución industrial. Los avances médicos de aquí a pocos años van a ser gigantescos y las personas vivirán mucho más. Habrá que inventar otros oficios. Los que ahora son jóvenes dentro de tres décadas se maravillarán con lo que hemos dejado atrás.
Durante el foro hablarán de favorecer los usos mixtos dentro de la ciudad, como hábitat y espacio de trabajo.
-Evidentemente. Los estudios que dicen que dentro de veinte o treinta años el 60% de los empleos se podrán hacer desde el hogar. Aunque suene raro, volveremos al concepto del caserío, donde se vivía y trabajaba.
Pero todo indica que la población seguirá viviendo en núcleos urbanos.
-Las viviendas van a cambiar, no van a ser tan estrictas: de tres habitaciones, una sala y una cocina. Habrá grandes espacios abiertos donde cada persona o familia pueda organizar el espacio de la forma que mejor le convenga. Serán espacios más diáfanos, donde cada uno adaptará la vivienda y los metros que le interese a sus necesidades. Hay una tendencia más de loft que de viviendas con estancias muy concretas.
¿Y cómo incidirá en el urbanismo?
-El urbanismo siempre tiene la dicotomía de una ciudad compacta, como la de Bilbao, o una ciudad dispersa o espartana, en la que hay que utilizar el coche o la bicicleta para cualquier cosa. Tenemos ejemplos de esa dicotomía en el siglo XX. En muchas ciudades europeas, y sobre todo en las americanas, se llevan las ciudades dispersas. Creo más en la compacta, que es la que me aleja del futuro, que es incierto, y me aproxima al pasado, es la que he vivido y de la que estoy enamorado.
¿Y cuál es la tendencia de las ciudades para las próximas décadas?
-En los próximos años, las ciudades no experimentarán grandes cambios en cuanto a la configuración. Calculo que en el siglo XXII habrá muchos edificios y, a no ser que ocurra algún desastre de fuerza mayor, seguiremos disfrutando de edificios magníficos y reconvertidos.
Este año se buscarán ideas para Otxarkoaga dentro del concurso de BIA Forum.
-Contiene edificios de gran altura en las que no hay ascensores todavía, se hizo un plan especial para que todas las casas pudieran tenerlo? Consiste en ver cómo Otxarkoaga se puede convertir en un barrio mejor. Nos tenemos que preocupar de buscar la belleza en todos los barrios. Cuando hablo de ciudades hablo de espacio público que es el que compartimos todos. Las viviendas se pueden mejorar, se pueden sustituir, pero los espacios y los vacíos que quedan entre los edificios, eso es lo que hay que mejorar.