LLAMARLO cafetería, créanme, sería empequeñecerlo, por mucho que de el servicio clásico. EzBai es el nombre del local inaugurado ayer en el polideportivo de Lasesarre, un espacio abierto a muy variadas actividades, como si la vida multiusos se desenfundase allí mismo, como si fuese una de esas navajas cargadas de funciones a las que solo les falta la caña de pescar y el periódico de los domingos. EzBai es un proyecto puesto en pie por Txomin Telletxea, Leonardo Portal, Antonio Domínguez y Javier Mejuto, cuatro pioneros que han lanzado un órdago a mayor y llevan solomillo en la mano. Buen juego de cartas dadas.
Así como el deportivo despliega ante sus usuarios, gente aficionada al deporte, todo un abanico de posibilidades -piscinas cubiertas donde nadar o, como ayer sucedía, con granizo golpeando los cristales, donde jugar a waterpolo; canchas de balonmano, fútbol sala, baloncesto y voleibol; pistas de tenis y de pádel; gimnasio, sala de fitness, zona de talasoterapia y un fabuloso campo de fútbol de hierba artificial...-, EzBai lleva también un ritmo trepidante. Para empezar, diremos que llevan el ambigú de todos los espacios deportivos. No se quedan ahí. El local está dividido en tres espacios gastronómicos y de ocio: una cafetería al uso con menús del día y platos ligeros, un restaurante de buena mesa con espacio para 200 comensales y una zona para el retiro espiritual donde tomarse copas de altura y cafés bien servidos: casi una reserva donde relajarse tras las batallas diarias. No se queda ahí el proyecto, ya que sus promotores cuentan con el apoyo de un auditorio para otras 200 personas, un txikipark y espacio por las cuatro esquinas.
Allí bullirá la vida a diario. No en vano, están programadas un sinfín de actividades. Para empezar, los martes se impulsará la mintzapraktika en la barra para uso, manejo y disfrute del euskera, y los jueves, abracadabra, el english coffee , para hacer lo propio con el inglés. Con semejantes servicios aspiran a convocar y organizar eventos de todo tipo y condición (un encuentro de jóvenes diseñadores vascos y un encuentro alrededor del Camino de Santiago ya han pedido cita en la peluquería, dicho sea sin segundas y con el mayor de los respetos...) y han organizado una escuela de hostelería para uso y disfrute de la calle; donde los hijos se formen y cocinen para sus progenitores y viceversa, en un divertido guiño de las cocinas. Está anunciada también una espléndida terraza pero ayer no era el día. Gajes de la climatología.
Ante tanto esplendor no faltaron a la cita la alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo; acompañada por Jon Andoni Uria, Danel Sola y Rakel Olalla, entre otros; Julián Ruiz, secretario general de Cecobi, Montxu Martínez, Alberto Martín, Idoia Aranguren, Maite Elustondo, Iñigo Zulaika, Txelu Etxebarria, Roberto Ruiz, Kike Hermosilla, director comercial de DEIA; Javier González, Jon Olabarria, Aratxu García, Arantza Peña. Alazne Merino, Almudena Argüeso, Oier La Concha y Purificación García, entre otros asistentes a un encuentro que ofreció cálido refugio a una noche de lobos. A la cita tampoco faltaron Txiki Carrocera, Esther Fernández; el dúo formado por Luis Justiniano y Jon Portal, que llevarán las riendas; Maite Martínez, Ane Alonso, María Jesús Agirre y un buen número de asistentes que gozaron de los primeros brindis. Hace unos días ya que el largo tranvía marcha y no le faltan usuarios, no.
De arriba abajo y de izquierda a derecha, por el ancho, largo y alto local con vistas al deporte se movieron Alfonso del Olmo y Ricardo García, embajadores plenipotenciarios de Café Fortaleza; Begoña González, Nieves Argüeso, Miriam Ledesma, Karmele Telletxea, Juan Carlos Sánchez, Cristina García, Mikel Odriozola, Laura Fernández, Izaskun Iriarte y toda una legión que prometió volver. Como para no.