Bilbao - La Diputación está estudiando la posibilidad de que las unidades de Bizkaibus realicen paradas a demanda en horario nocturno, con el fin de incrementar la seguridad de los usuarios, sobre todo de las mujeres. “Acercarlas lo más posible a su casa, o el que sea su destino en ese momento, es una medida que puede contribuir a que se reduzcan las agresiones que, desgraciadamente, sufren en ocasiones o, al menos, su sensación de inseguridad”, explica el diputado de Transportes, Movilidad y Cohesión del Territorio, Vicente Reyes. Actualmente se está analizando la vialidad técnica de la iniciativa y el departamento tiene la intención de tomar una decisión en dos meses. La medida se completará con otros pasos, como iluminar con leds todas las nuevas marquesinas que se van a instalar y llegar a que el 100% de los autobuses que componen la flota cuente con cámaras de seguridad en su interior.

Al margen de los datos objetivos de agresiones, la sensación de inseguridad es palpable hoy en día entre las mujeres. Según un estudio encargado por el propio departamento, cuatro de cada diez mujeres, sobre todo las más jóvenes, admite modificar sus recorridos, evitando calles y ciertos espacios por una cuestión de seguridad. Lo hacen, sobre todo, las más jóvenes: el 65% de las de entre 18 y 25 años, frente al 26% de las mayores de 55. Según los autores del estudio, ello puede deberse a que son ellas las que salen más por la noche, respecto a otras personas de más edad, y el desplazamiento en solitario o el acceso a un portal produce mayor sensación de inseguridad, basada en hechos reales de agresiones sexuales. También es una situación que afecta más a las vecinas de Bilbao; no en vano, se trata de una ciudad, y las ciudades suelen estar acompañadas de mayores niveles de inseguridad y percepción de la misma.

Para terminar con esas agresiones y la sensación de inseguridad que acompaña a una mujer al volver a casa por la noche, las soluciones pasan por poner el foco en el autor de las mismas, educando desde la infancia en la igualdad y con medidas judiciales adecuadas. Pero, mientras tanto, todas las medidas que puedas contribuir a que las mujeres se sientan más seguras ayudan. Las paradas a demanda, o paradas antiacoso, se han ido extiendo desde hace unos años por las ciudades europeas como Nantes, que ya lo estableció en 2015, y Bilbao decidió implantarlas el pasado mes de enero en sus autobuses nocturnos. Vigor, Terrassa, Zaragoza o Gijón son otros municipios del Estado que han establecido ya la medida o están estudiando cómo hacerlo.

El funcionamiento es sencillo: en lugar de tener que bajarse obligatoriamente donde hay una marquesina y tener que caminar solas hasta su casa, las mujeres pueden solicitar bajarse en cualquier punto del trayecto entre dos paradas. Aunque la medida está ideada con el foco puesto en las mujeres, realmente se trata de una iniciativa que puede beneficiar a cualquier usuario del servicio: hombres, jóvenes, personas mayores... Al subirse al autobús, el viajero le tiene que indicar al conductor el lugar exacto donde quiere bajarse, de forma que nadie más lo sepa, y se queda en los asientos delanteros del vehículo, de forma que, una vez llegados al punto donde va a apearse, pueda hacerlo por la puerta delantera, al lado del chófer, y no por la trasera. De esta forma, el conductor puede controlar también que ninguna persona más se baja en ese parada.

Hasta el momento, la medida se ha implantado en rutas urbanas de autobuses, dentro de las ciudades. La Diputación quiere dar, en ese sentido, un paso más y abrir esta iniciativa a todo el territorio. “A todas las personas, hombres y mujeres, nos pueden robar, pero las agresiones sexuales son específicas de las mujeres y se producen en entornos tanto urbanos como no urbanos, en los que se encuentran solas. Estas paradas lo que quieren es acercar lo más posible a su lugar de destino para evitar ese riesgo”, explica el diputado foral de Transportes, Movilidad y Cohesión del Territorio.

En principio, la intención es ponerla en marcha en todas las líneas, en horario nocturno. Vicente Reyes advierte de que, de momento, la medida se encuentra en periodo de estudio. “Tiene una complejidad mucho mayor que en un entorno urbano, porque recorremos más kilómetros, hay más recorridos fuera de municipios...”, explica. El departamento tiene que analizar la viabilidad técnica de la propuesta para ver, por ejemplo, desde el punto de vista de la seguridad, en qué lugares se puede parar y en cuáles no. “Hay una serie de factores que tenemos que analizar antes de tomar una decisión”, incide. También quiere compartir la propuesta con las empresas concesionarias del servicio antes de tomar una decisión.

Una vez realizado todo el análisis, el departamento foral tomará una decisión definitiva sobre si implantar la medida o no, y en qué circunstancias, como el horario definitivo o las líneas. “Es una medida compleja que hay que estudiar. Y, en caso de que sea posible, tenemos la voluntad de llevarla adelante”, señala. La decisión, añade Vicente Reyes, se tomará en dos meses.

Marquesinas iluminadas No es la única medida que va a adoptar el departamento para mejorar la seguridad de las mujeres. Las nuevas marquesinas que se van a implantar a partir de este año, por ejemplo, serán completamente transparentes y estarán iluminadas por led durante el mismo tiempo que esté encendido el alumbrado municipal. “Son dos ventajas importantes para las mujeres: al ser transparentes se ve incluso a distancia lo que ocurre en el interior y además van a tener iluminación. Son dos elementos que dan mucha seguridad a las mujeres porque se ve a distancia”, apunta Vicente Reyes.

Además, la instalación de cámaras de seguridad en el interior de los vehículos alcanza ya a más de la mitad de la flota y la intención del departamento es llegar al 100% a la mayor brevedad posible. Las cámaras cubren todo el espacio del vehículo, de forma que se vigila cualquier agresión que pueda surgir una mujer que viaje a bordo del mismo. “Estas cámaras ayudan a la seguridad tanto de los usuarios como de los conductores”, finaliza Reyes.