URDULIZ - El hospital Alfredo Espinosa de Urduliz dispone a partir de hoy con 64 nuevas camas con motivo de la apertura del área de hospitalización, situado en el bloque B del complejo hospitalario, inaugurado en julio de 2016. La puesta en marcha de este nuevo servicio supondrá la incorporación de 33 profesionales sanitarios más a una plantilla que cuenta ya con más de 263 profesionales. Del total del equipo humano actual, 75 son médicos, 152 personal de Enfermería y auxiliares de Enfermería, 29 personal técnico y 40 celadores, profesionales administrativos y personal de almacén. Está previsto que este número se incremente a lo largo del próximo año cuando se barajan cerca de 2.000 ingresos.
Aunque esta área se abre hoy, el servicio fue inaugurado ayer por el lehendakari, Iñigo Urkullu, y el consejero de Salud, Jon Darpón, quienes conocieron de primera mano las características del equipamiento técnico y saludaron al personal sanitario.
El lehendakari destacó que esta apertura supone “una muestra más” del compromiso del Gobierno vasco con el sistema sanitario público. “En Euskadi seguimos ampliando y mejorando los servicios sanitarios y el año que viene el hospital de Urduliz estará en pleno funcionamiento y estaremos también en disposición de abrir el nuevo hospital de crónicos de Eibar, lo que demuestra que el Gobierno vasco y el conjunto de la sociedad vasca entendemos la sanidad pública como un bien común que debemos salvaguardar y fortalecer”, subrayó.
NOVEDADES El supervisor de la unidad de hospitalización, Arturo Bidea, fue el encargado de explicar a Urkullu y Darpón, así como a Javier Bilbao, alcalde de Urduliz, las flamantes instalaciones. Las 32 habitaciones con camas dobles están repartidas en dos alas, 16 en cada una de ellas, en la tercera planta del bloque B del hospital. “Cuentan con lo más innovador en cuanto a tecnología”, destacó Bidea. En concreto, las habitaciones destacan por su “amplitud” y por contar “con unas camas fabulosas que cuentan con control de mando incorporado para disponer de una óptima postura”, subrayó Bidea. “Para el trabajo de los profesionales es una ventaja”, apuntó Urkullu. “El objetivo es poder trabajar con el paciente en las mejores condiciones”, agregó Bidea.
Así, además de contar algunas de ellas con unas espectaculares vistas al entorno natural de las peñas de Santa Marina de Urduliz, las habitaciones están equipadas con todo tipo de avances tecnológicos como dos televisiones de última generación en cada una de ellas, armarios con clave electrónica “para incrementar la seguridad” y unos servicios “cómodos y amplios” en los que se ha pensado hasta el último detalle. “La duchas tienen mamparas para una mayor comodidad y barras de apoyo”, especificó Bidea. Decoradas en tonos claros, con predominio del blanco y franjas que añaden un toque de color, el lehendakari destacó la “gran luminosidad” presente en cada estancia.
Además, esta nueva área cuenta con unas habitaciones específicas denominadas de “presión positiva” por su sistema de ventilación y que están destinadas a “aislamiento preventivo”, expuso Bidea. “Por ejemplo, para tratar a pacientes oncológicos en los que se necesita que el aire salga hacia fuera”. Igualmente, el complejo cuenta con cuatro habitaciones a la inversa, de “presión negativa”, destinadas a “pacientes infectados”. “Se trata de habitaciones en las que se impide que el aire salga hacia el exterior”, concluyó Bidea.