Gatika - La interconexión eléctrica entre Gatika y la localidad francesa de Cubnezais, cerca de Burdeos, a cargo de Inelfe -empresa mixta creada a partes iguales por Red Eléctrica de España, el gestor de la red pública de transporte en España y su homólogo francés, Réseau de Transport d’Electricité- fue presentada el pasado martes, 24 de octubre, por parte de representantes de Red Eléctrica Española a los vecinos de Gatika en el gaztetxoko municipal, dentro del plan de tramitación inicial del proyecto que requiere de un proceso de participación pública.

De este modo, según destacan los responsables del proyecto, será “la primera interconexión fundamentalmente submarina entre España y Francia”. En concreto, esta nueva infraestructura permitirá “aumentar la capacidad de intercambio eléctrico desde 2.800 hasta 5.000 megavatios, incrementando así la seguridad, la estabilidad y la calidad del suministro eléctrico entre los dos países y también con el resto de Europa”, apuntan.

Este proyecto fue designado el 14 de octubre de 2013, por la Comisión y el Parlamento Europeo como “Proyecto de Interés Común”. Al recibir esta catalogación, los responsables del mismo están obligados a “exponer públicamente la información del proyecto y a recoger las aportaciones que sobre el mismo pueda realizar cualquier asociación, ciudadano, agente económico y social”.

Una vez concluida la reunión informativa, que registró una gran asistencia vecinal, y “darse a conocer la afección” que dicho proyecto generará en el municipio, el Ayuntamiento ha convocado a los vecinos a una reunión el próximo 6 de noviembre, a las 19.00 horas, en el gaztetxoko “para tratar este asunto”.

En cuanto a la repercusión de este proyecto en el municipio, la alcaldesa de Gatika, Leixuri Arrizabalaga, muestra su preocupación. “Este proyecto no es una buena noticia para Gatika. Ha creado mucha incertidumbre y nuestra postura es la de defender los intereses de Gatika y los gatikarras”, señala.

No obstante, la regidora asegura que se trata de “un asunto que escapa” a las competencias municipales. “Han declarado el proyecto de interés común y se llevará a cabo aunque el Ayuntamiento se oponga”, indica. Ante esta situación, Arrizabalaga muestra su “preocupación por la incidencia que el proyecto pueda tener en el municipio”. Por eso, el equipo de gobierno quiere “consultar la opinión de la ciudadanía y recoger sus sugerencias” en la próxima reunión de cara a presentar “unas alegaciones que contemplen que el proyecto tenga las mínimas afecciones posibles para el municipio”.

Conexión submarina

La interconexión eléctrica que plantea el proyecto enlazará la subestación eléctrica de Gatika y la subestación de Cubnezais, situada al norte de Burdeos. Para ello se aprovechará la infraestructura existente Gatika-Lemoiz, compuesta por dos líneas eléctricas de 400 kilovatios. El proyecto contará con una estación conversora en cada extremo del enlace que permitirá transformar la corriente continua en corriente alterna para conectarse a la red de transporte de electricidad de cada país.

En este sentido, el trazado submarino tendrá una longitud aproximada de 280 kilómetros desde la costa vasca hasta la costa francesa de Médoc, mientras que entre las dos subestaciones tendrá una longitud de 370 kilómetros. Según la empresa responsable del proyecto, “la elección del trazado y la colocación del cable en el fondo marino minimizarán el impacto sobre los usos marítimos y especialmente en la pesca”. El trazado partirá de la estación conversora, que se construirá próxima a la subestación de Gatika, hasta la zona del Golfo de Bizkaia. En el ámbito francés, el trazado subterráneo recorrerá menos de 100 kilómetros, desde la ribera derecha del río Dordoña, pasando por debajo de éste y del Garona para llegar al litoral aquitano a través del Médoc, respetando el medio ambiente y las actividades humanas.

En esta zona costera se deben integrar numerosos elementos como son: la sensibilidad ambiental, la frecuentación de las playas, los núcleos urbanizados, la sensibilidad respecto al retroceso de la línea de costa, “así como la posibilidad de utilizar infraestructuras ya existentes para alejarse del litoral. Los puntos de aterraje más adaptados se encuentran en la zona de la costa de Médoc”.

El enlace interconectará dos sistemas de corriente alterna a través de una línea submarina en corriente continua. En cada extremo del enlace, las estaciones conversoras “transformarán la corriente continua en alterna para conectarse con las redes de transporte de España y Francia”, indican. Según los responsables del proyecto, entre los beneficios del mismo están que “permitirá incrementar la seguridad, la estabilidad y la calidad del suministro eléctrico entre los dos países y también con el resto de Europa”.