Basauri - Desde ayer, Basauri cuenta con una de las Neveras Solidarias que conforman la red que comenzó el galdakoztarra Álvaro Saiz, presidente de Galdakaoko Boluntarioen Gizarte Elkartea (GBGE). La iniciativa tiene el objetivo de luchar contra el despilfarro de alimentos y consiste en instalar un frigorífico en el que cualquier persona u podrá depositar y coger alimentos.

Asier Iragorri, concejal de Política Social del Ayuntamiento de Basauri; Álvaro Saiz, Ainhoa Crespo y Raúl Vallejo, de Nevera Solidaria, e Itxaso Urionabarrenetxea, responsable comarcal de Intervención Social de Cruz Roja, presentaron ayer la que es la primera Nevera Solidaria en el municipio.

Situada en la calle León número 3, en un local de la Cruz Roja, ya está en funcionamiento, ya que desde ayer, el frigorífico contiene ya distintos alimentos. En el caso de Basauri, la implantación de la nevera viene motivada por la colaboración entre el Ayuntamiento, GBGE y la Cruz Roja. Tal y como explicó Iragorri, “llevábamos tiempo hablando con algunas asociaciones y vimos que podía ser muy interesante instalar una de estas neveras”.

Para ello contarán con la colaboración de voluntarios de Cruz Roja, que serán quienes se encarguen del mantenimiento y limpieza de la nevera, gestionando y comprobando día a día el buen estado de los alimentos. “Serán dos o tres voluntarios los que cuiden de que el frigorífico siempre esté en buenas condiciones”, explicó Urionabarrenetxea.

Como en el resto de estas neveras, “estará disponible las 24 horas del día y los vecinos podrán depositar en ella los alimentos que les sobran para que los aprovechen otras personas”. Según explicó el alma mater de la iniciativa, Álvaro Saiz, “este es un proyecto abierto a todas las personas, independientemente de su situación socioeconómica”. Y es que “la filosofía de Nevera Solidaria pretende romper la estigmatización de la pobreza, entendiendo que no hay nada más excluyente que hacer algo para personas excluidas”.

En este sentido, “cuando alguien que no lo necesita realmente coge algo de la nevera, es algo positivo, porque puede ser por concienciación sobre el despilfarro de alimentos, por ejemplo”. Así, el que “de verdad lo necesite no se sentirá señalado al hacer uso de la nevera”, matizaron. En cuanto a su uso, la normas están colocadas en la puerta de la nevera. Entre otras, los productos elaborados deben estar etiquetados con la fecha de elaboración e ingredientes y está prohibido depositar pescado crudo.

La red de neveras solidarias por todo el Estado suma ya 17 de estos frigoríficos que surgieron como medida contra el despilfarro de comida. Pero no la cosa no quedará ahí, ya que, como adelantaron ayer desde GBGE, “hay otras cuatro en marcha”. Y es que la de Basauri se puso ayer en marcha y pronto lo harán más neveras. Una de ellas se instalará también en territorio vizcaino, concretamente en Mungia. Otra en Las Palmas de Gran Canaria y las otras en Barcelona. - I. U.