Bilbao - Ha sido el último fosterito que se ha construido en Bilbao y en muchos años ostentará ese calificativo ante las escasas opciones de que en un futuro inmediato se construyan más líneas de metro subterráneas.

El próximo lunes los vecinos del barrio de Uribarri estrenarán otra vez la línea 3 cuando puedan acceder a través del cañón construido en la plaza de las Escuelas. Una boca que no pudo llegar a tiempo de abrirse en abril último cuando entró en marcha el trazado ferroviario entre las estaciones de Matiko y Etxebarri. A la vez entrará en servicio el ascensor ubicado muy cerca del fosterito, un elemento que muchos vecinos esperan ya que la media de edad en el barrio es elevada y el uso del transporte vertical en una zona con tantas cuestas siempre es muy bien valorada.

Con el cañón de acceso y el ascensor se completan todas las entradas y salidas de la estación de Uribarri. Además de la citada, la de Travesía C con su ascensor, San Valentín de Berriotxoa y Zumalakarregi.

Se da además la circunstancia inédita en toda la red de metro de que la estación de Uribarri podrá tener usuarios que no vayan a montar en el metro. Ello se debe a que será posible acceder andando desde la boca de Zumalakarregi y salir por la de la plaza de las Escuelas o viceversa, sin tener que pagar billete alguno.

A falta de algunos retoques, la plaza al completo se abrirá en su totalidad el viernes día 11 con lo que los vecinos podrán volver a disfrutar de la explanada de 1.800 metros cuadrados que las obras les han secuestrado durante varios años. La plaza de las Escuelas se ha reformado de forma integral.

Así la reurbanización del espacios se ha efectuado la mitad con baldosa granítica y el resto con hormigón impreso. En la misma estación de Uribarri, la boca de acceso de San Valentín de Berriotxoa sirvió también como argumento para peatonalizar parte de la calle Trauko.

El ejemplo más contundente ha sido la nueva estación de Matiko y el soterramiento de sus vías, que han eliminado la trinchera ferroviaria entre Artasamina y la calle Tiboli y han permitido liberalizar 60.000 metros cuadrados de superficie para uso y disfrute de la ciudadanía.

Parque de Etxebarria En este sentido, también los vecinos del entorno del Parque de Etxebarria disfrutan ya de toda la extensión de este pulmón verde de la villa. ETS también ha liberado todo el espacio que ocupó durante seis años por necesidades de la construcción del trazado ferroviario subterráneo, una superficie importante ya que cubría casi un tercio de extensión del espacio verde mencionado.

Lo más visible es la recuperación de todos los parterres y jardines que fue acotados con vallas durante más de un lustro para utilizarse como entrada y salida de camiones a la obra, así como área de acopio. ETS ha repuesto los 5.720 metros cuadrados de superficie ocupados.

Otro elemento recuperado también es el espacio de ocio ubicado por encima de la plaza del Gas. Además de la colocación de un suelo más moderno del preexistente en la pista de juegos polivalente se han añadido siete aparatos de fitness. Con la apertura de esta zona, la parte baja del parque de Etxebarria recupera una importante área de esparcimiento para los vecinos de la vaguada del Gas, y libera el tradicional paseo de subida o bajada a la loma del parque que a buen seguro en la cercana Aste Nagusia volverá a ser muy utilizado.

Junto a la zona de juegos se ha construido una caseta pintada de verde para que se confunda con el paisaje, que es en realidad una salida de emergencia de uno de los túneles de la Línea 3.

Su construcción ha sido obligada por la normativa que especifica que estas galerías de evacuación son obligadas de una longitud superior a un kilómetro. En este tramo, la distancia entre las dos estaciones más próximas es de más de mil metros.