Santurtzi - En plena Guerra Civil española, a lo largo del mes de mayo de 1937 el puerto de Santurtzi fue testigo de unas de las imágenes más desgarradoras que dejó aquel conflicto bélico que precedió a cuatro décadas de dictadura. Estas mostraban cómo varios miles de niños huían, dejaban atrás el horror de la guerra para tratar de reiniciar su vida en países en paz como Reino Unido, Rusia y Francia. Embarcaciones como el vapor Habana y el Goizeko Izarra fueron las que trasladaron a estos menores a un mundo sin bombas ni ataques.
Han pasado 80 años de aquellas imágenes y ocho décadas después, Santurtzi quiere homenajear a todos aquellos niños que tuvieron que dejar sus hogares y que en algunos casos nunca más volvieron a Euskadi. Será el próximo miércoles día 24 a las 13.00 horas, en ese instante, algunos de esos niños de la guerra, hoy octogenarios y nonagenarios escenificarán su vuelta a casa. Lo harán de la misma forma que se fueron, en barco, pero a diferencia de lo que ocurriera hace 80 años cuando les despedían adultos, serán niños de diversos centros educativos del municipio quienes les recibirán en un acto que a buen seguro estará cargado de emoción. “Es una historia triste pero que quizá, por eso mismo, debamos recordarla. Son muchos los santurtziarras a los que la guerra les obligó a abandonar nuestro pueblo y es algo que no solo debemos conocer, sino también reconocer”, aseguró Aintzane Urkijo, alcaldesa de Santurtzi.
En esa misión de recordar lo ocurrido no solo durante la Guerra Civil si no también durante la dictadura y de reconocer a las víctimas de los diversos grupos terroristas que han actuado en Euskadi y quienes murieron a causa de la violencia policial, el Consistorio santurtziarra ha contado con el apoyo de Gogora. Así, desde esta mañana y hasta el día 24, el puerto acogerá la Plaza de la Memoria, un espacio que da voz a quienes han vivido en sus propias carnes la crueldad de cualquiera de estos episodios negros de la historia de Euskadi. Así, esta Plaza de la Memoria estará dividida en tres espacios: el primero de ellos estará dedicado a las víctimas del terrorismo, el segundo a las víctimas de la violencia policial y el tercero a los niños de la guerra. “Para nosotros es muy importante contar con la ciudadanía en la construcción de la memoria”, destacó Aintzane Ezenarro, directora de Gogora, una exposición que recoge testimonios desde el plano más humano.
Todo ello podrá ser conocido por todos los santurtziarras pero en especial por los escolares, ya que habrá talleres para estudiantes de 4ª de ESO a 2ª de Bachillerato. “La memoria no es solo recordar lo vivido, sino aprender de ello”, concluyó Ezenarro.