Bilbao - ¿Qué es ser escaparatista?
-Un escaparatista debe ser un poco artista. El artista luego puede conseguir que el escaparate sea meramente comercial. El escaparate en realidad debe llevar un 60% comercial y un 40% de arte. En los concursos pasa al revés: sería un 60% de arte y un 40% comercial. Con lo cual depende de las ocasiones y de las tiendas. Yo creo que hoy en día al que le gusta el escaparate debe fijarse mucho en cómo va una chica, como se llevan los pañuelos o las chaquetas. Un detallista, vamos.
¿Y de dónde sale el Mikel Gainza escaparatista?
-En la mili, en el Ferrol, comencé a hacer escaparates y me ganaba un dinerito, pero en realidad, todo se lo debo a la empresa Rafael Matías. El comercio ya contaba con un escaparatista, pero casualmente marchó a Australia.
Y vio su oportunidad.
-Exactamente. La empresa confió mucho en mí porque vieron una valía y gastaron mucho en los estudios. Y así ya llevo 30 años. Actualmente trabajo con una chica que hace diez años que es escaparatista. Ella es Sulvey Celaya. Hoy en día hay mucho escaparatista queriendo poner por ejemplo el burrro al revés, pero si pones el burro al revés tienes que explicar porqué. Todo debe guardar su ética.
¿Y se trata de su único trabajo?
-Hoy por hoy los comerciantes tampoco gastan mucho en escaparates, por eso no se puede vivir de esto. Afortunadamente yo tengo otra empresa, y de ahí vivo. Tengo un amigo peluquero que me deja hacer lo que quiera en el escaparate. Yo disfruto y él, porque no le cobro.
¿Se ha convertido el escaparate en un elemento esencial en época de crisis?
-Sí, el escaparate es el vendedor invisible porque no cuenta con estadísticas. Uno entra a un establecimiento a comprar una corbata y tú como vendedor piensas que se la has vendido, pero puede ser que le haya llamado la atención paseando por la calle. Doy mucha importancia a los comerciantes que gastan su dinero en un escaparatista, porque es un profesional.
¿Y cuándo llegan las navidades se suelen colocar otros elementos?
-Soy bastante reacio a poner adornos navideños. Si me dicen de poner al niño Jesús o un belén lo haré, pero yo no soy de bolas de Navidad. De hecho yo he hecho muchos concursos en estas fechas y casi ninguno ha guardado relación con la Navidad.
Y el escaparate de Rafael Matías Tejidos, ¿ha gustado?
-Totalmente. La gente opina que es original. Porque hay veces que haces un escaparate precioso para ti y la gente no lo entiende.
¿Como por ejemplo?
-Hace unos años creé un Charlot en una sastrería. Nadie me entendió y para mí fue de los más logrados, pero es algo que suele pasar.