Galdakao - Ir a por setas es una afición muy arraigada en Galdakao. La recolecta de los hongos y su posterior degustación no es nada nuevo, ni mucho menos. A lo largo de la historia se han utilizado las setas como alimentos, para la cura de enfermedades e incluso, como sustancias alucinógenas en determinadas ceremonias. Sin embargo, se ha avanzado mucho y actualmente, la manera de recolectarlas ha evolucionado. En parte, gracias a la sabiduría y la pasión de algunos por la micología.
Entre estos apasionados está Aitor Calvo, que junto con sus compañeros Juan Andrés Román, Ricardo Ibarretxe y Francisco Javier Calvo dedica una gran parte de su tiempo libre a compartir con los demás todo su saber sobre el mundo de las setas.
Gracias a sus conocimientos y sobre todo, a su gran afición, estos cuatro galdakoztarras crearon una página web, una app y ya han publicado dos libros, el último hace poco más de una semana.
En el caso de Aitor, llegó al mundo de las setas más tarde que sus compañeros de proyecto y “todo lo que sé, lo he aprendido de ellos”, relata, aunque a día de hoy sea un entusiasta y un empedernido setero. La afición por la micología le viene de familia, ya que junto a su padre y su hermano Javier, que también participa en esta asociación, acudía a por setas “muy a menudo”. Eso sí, el germen de este apasionante proyecto que iniciaron hacia el año 2009, lo plantaron “Javier y Juan, que llevan colaborando juntos desde hace tiempo y han participado en varios concursos micológicos”, quedando campeones en el concurso exposición de setas de Bizkaia durante tres años seguidos.
Tanto Ricardo como el propio Aitor se unieron más tarde, aunque “gracias a Ricardo hemos podido llegar hasta donde en aquel momento no podíamos”, a poder dar pautas para diferenciar “las especies más similares morfológicamente, que necesitan de una microscopía o el uso de reactivos para su identificación”, comenta.
Y es que, en la asociación Micológica Fungipedia, “cada uno de nosotros hemos adquirido unos roles concretos”, explica, aunque ciertamente todos comparten “la pasión por la micología”. En este sentido, Aitor destaca que tras muchos años, “nos hemos convertido más en estudiosos de los hongos que en lo que podríamos llamar seteros o aficionados a recolectar y disfrutar las setas”.
Todo ese saber adquirido a lo largo de tantos años les ha servido para publicar su segundo libro: Setas. La guía definitiva. Se trata de un manual en el que se detallan a la perfección 117 especies de setas comestibles. “Incluye la ficha completa de cada una, es decir todas las especies comestibles de la Península Ibérica que tienen cierta entidad culinaria”. Y además, al lado aparecen las posibles confusiones y las descripciones de ambas.
Han editado 5.000 copias, aunque “en estos tiempos es complicado vender tantos libros”, reconoce Aitor. Sin embargo, la guía ofrece documentación y saber propio a partes iguales. Aunque han leído mucho sobre micología, todos los textos están redactados desde cero, “evitando caer en errores y aportando siempre todos los datos interesantes provenientes de nuestra propia observación y estudio, por lo que es la culminación de todo este duro trabajo”, concreta.
El primer paso del proyecto fue la creación de la web Fungipedia.org, que recibe unas 300.000 visitas mensuales. “Juan ayudaba a la gente a diferenciar setas en su bar, donde ha salvado a más de uno de comer setas tóxicas”. Partiendo de ahí, “se nos ocurrió plasmar esa ayuda en Internet”. También han creado una aplicación móvil que ya cuenta con 40.000 descargas y que ofrece aspectos muy interesantes. Fungipedia “es el catálogo de especies más extenso en español que hay disponible como aplicación móvil”, asegura Aitor. Como próximo reto, “nos hemos marcado la traducción de la web y la app a otros idiomas, aunque se necesita mucho dinero”. Pero la verdad es que los cuatro se dejan el alma en este proyecto, por amor al arte.