BILBAO. El portavoz del Gobierno vasco y consejero de Administración Pública y Justicia, Josu Erkoreka; la viceconsejera de Justicia, Ana Aguirre; el director de Justicia, Manuel Valín; el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto; el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, Juan Luis Ibarra; la diputada de Acción Social, Isabel Sánchez Robles y el director general de Administración y Promoción Social de la Diputación foral de Bizkaia, Gabin Azaola, han visitado este jueves las instalaciones en las que se está construyendo este servicio.
En concreto, está situado en el barrio de Santutxu y sustituirá al ubicado en el barrio de Uribarri. Este nuevo Punto de Encuentro permitirá garantizar el "bienestar de los menores en caso de rupturas conflictivas". Josu Erkoreka ha resaltado que, con estas instalaciones, se "renueva, actualiza y moderniza" el centro de Uribarri.
El portavoz del Gobierno vasco ha señalado que los Puntos de Encuentro Familiar son espacios "neutrales" que el Gobierno pone al servicio de los menores, de los progenitores, y el resto de la familia para aquellos supuestos de conflicto familiar, en los que la autoridad judicial "ha decidido que los encuentros entre los diferentes componentes de la familia tenga que tener lugar o se desarrolle en un espacio neutral".
Erkoreka ha hecho hincapié en que estos centros sirven "para el bien de los diferentes componentes de la familia, pero, sobre todo, para preservar el interés superior del menor que puede estar afectado".
Según ha manifestado, el objetivo es que el menor sufra "el menor impacto posible" y ha explicado que este Punto de Encuentro será "más seguro", no solamente porque estará dotado de mecanismos de seguridad avanzados y de un sistema "sofisticado" de videovigilancia, si no porque, además, se dispondrá de dos puertas de acceso separadas e independientes "para evitar el contacto entre progenitores y situaciones de riesgo".
"Van a ser unas instalaciones más accesibles porque están habilitadas con toda la infraestructura necesaria para las personas que tienen limitaciones y problemas de movilidad", ha indicado.
Por su parte, el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, Juan Luis Ibarra, ha manifestado que es un servicio que "se vincula fundamentalmente a la Justicia relacionada con el derecho de familia y evidentemente a los juzgados de violencia de género".
También ha señalado que este centro "es un buen exponente de la calidad que se está alcanzando en la Comunidad Autónoma del País Vasco en el sistema de justicia". "La calidad hoy de la justicia no se cifra sólo en las resoluciones judiciales, sino que se percibe por los usuarios de la justicia, que en este caso son menores", ha declarado Ibarra.
LAS INSTALACIONES
Este nuevo Punto de Encuentro familiar se está construyendo en tres locales situados en las calles Sagarminaga 8 y Georgia 3 y fueron adquiridos por el Gobierno vasco a la sociedad pública Visesa por un importe de 169.989 euros.
El centro cuenta con casi 400 metros cuadrados útiles, 150 metros más que en la actualidad. Las nuevas instalaciones contarán con 14 salas de visitas, tres salas de multiusos, tres zonas de recepción y zona de oficinas, salas de espera y aseos.
A lo largo del pasado año, el Gobierno vasco atendió en los Puntos de Encuentro Familiar a 802 familias, 1.064 menores y 1.639 personas adultas. En Euskadi existen cinco Puntos de Encuentro Familiar, en cuya financiación el Gobierno vasco invertirá este año 1,5 millones.Erkoreka ha destacado la importancia de estos centros teniendo en cuenta que el 95% de las mujeres que utilizan estos Puntos tienen una orden de protección o alejamiento.
En concreto, en 2015 el motivo de uso más frecuente fue el intercambio entre progenitores o tutores (58,12%) y visitas tutelas (38,74%). La mayoría de las familias que utilizó el servicio fue derivada por los juzgados de Violencia sobre la Mujer (41,6%) y de Familia (32,4%).
A lo largo del pasado año, en la gran mayoría de los casos atendidos, el 86,9%, la madre era quien tiene encomendada la custodia. En cuanto a la edad de los menores atendidos, se observa que la edad más habitual es de entre 3 y 11 años (67,7%) y en cuanto a su origen, la gran mayoría, el 87,9%, son menores nacidos en Euskadi.
En relación a las personas adultas usuarias, los datos de actividad de 2015 reflejan que el 62,2% tenían entre 26 y 44 años, el 5,5% menos de 25 años y el 18,1% más de 45 años.