Getxo - Únicamente hace falta salir a la calle para poder contemplar uno de sus diseños. Miles de niños visten, sin darse cuenta, creaciones suyas estampadas en sus camisetas. Una artista al servicio de una de las industrias textiles más poderosas del mundo. Olatz Manrique (Getxo, 1989) es diseñadora gráfica y de moda e ilustradora freelance y trabaja como responsable de dos líneas infantiles de Zara Baby Girl y Zara Baby Boy en el Estudio Marta González S.L. de Barcelona.

Precisamente en la ciudad condal es donde está afincada actualmente a pesar de haber vivido gran parte de su vida en Getxo, a caballo entre Las Arenas y Portugalete, donde el Puente Colgante le ha servido de nexo de unión con sus amistades. “Vivía en Las Arenas pero he hecho prácticamente toda mi vida en Portugalete, donde iba a la ikastola”, matiza. Sin embargo, su inclinación académica por la moda le llevó a trasladarse hace nueve años a Barcelona. “Vine para estudiar la diplomatura de Diseño de Moda”, explica. Sus opciones eran Madrid o Barcelona y se decantó por la capital catalana debido a su reputación. “Tenía muy buena fama y además gran parte de la industria textil está aquí”, detalla. Sin embargo, una vez adquiridos los conocimientos teóricos, las prácticas empresariales que realizó sobre esta materia no fueron de su total agrado y se inclinó por seguir estudiando. En esta ocasión, se decantó por las artes gráficas, más concretamente por la “ilustración creativa”, un mundo que le apasiona. “Hice un posgrado de ilustración creativa en moda, diseño y artes aplicadas que también está un poco relacionado con mis anteriores estudios”, señala. En este sentido, este nuevo horizonte académico le permitió adentrarse en el mundo de la ilustración. “Realicé todo tipo de trabajos. Desde retratos para una revista, hasta figurines pasando por productos de moda para el mundo editorial. Trabajamos todo tipo de técnicas pictóricas y programas informáticos”, destaca. Gracias a este nuevo camino emprendido, ahora se gana la vida diseñando para dos líneas infantiles de la cadena de tiendas del gigante mundial Inditex. “Lo que más vale a la hora de encontrar un trabajo es que alguien conozca cómo funcionas y haya estado trabajando contigo. Así me surgió a mí la posibilidad, a través de un profesor del posgrado”, relata Olatz, que disfruta mucho con su labor creativa. “Trabajar para un producto destinado a niños es muy divertido aunque hay muchas cosas que no se pueden poner”, indica Olatz, cuya ilustración de un gato en una camiseta resultó la más vendida de Zara Baby Girl a nivel mundial durante una semana. “Me inspiro en las cosas que me rodean. En un dibujo de la televisión o buscando por Internet”, sostiene.