Bilbao - Sacan conejos de chisteras, hacen aparecer palomas de cuadros y cambian los colores de los libros para hacer soñar a todos aquellos que, incrédulos, ven la magia producirse ante sus ojos. Ellos son el Mago Altrius, el Mago Pinilla, el Mago Nock y el Mago Oliver, quienes serán los encargados de crear la ilusión esta tarde, a partir de las 18.30 horas, en el teatro del Colegio Salesianos de Bilbao. A pesar de ser magos con espectáculos muy diferentes todos ellos comparten un objetivo en común: la solidaridad con el orfanato de Essaouira en Marruecos.

El proyecto ha sido impulsado por los jóvenes bilbainos Eva Laorden y Alain García. Ambos son dos educadores y actores amateurs que llevaban tiempo pensando en desarrollar un programa de voluntariado. Por ello, decidieron organizar algún tipo de acto benéfico y enviar el dinero recaudado a Marruecos, pero, finalmente, su idea no avanzó dadas las trabas administrativas.

Tras esto, los jóvenes pusieron en marcha su plan B. “Nos costó decidirnos, es difícil, pero al final pensamos que lo mejor es administrar los beneficios a nuestra manera”, zanjan. Por eso, el nuevo plan consistía en invertir el dinero obtenido en diversos materiales y talleres para “impulsar la creatividad y las opciones de trabajo de los más pequeños”, cuentan a DEIA. “De esta manera, integramos nuestra pasión por la educación y el arte”, aseveran.

Su idea cuajó en Bilbao. Decidieron hacer un acto benéfico en el teatro del Colegio Salesianos y con el dinero comprar diversos materiales como pizarras, disfraces y pinturas, entre otros materiales, para enviar a Marruecos. “¡Vamos a dejar nuestra huella allí! Lo que más nos entusiasmaba es sentir que colaboramos de una manera especial y esta es una causa muy solidaria”, argumentan con felicidad.

“Nos ha costado bastante llevar a la práctica esta idea porque tuvimos que tocar muchas puertas”, relatan. No en vano, después de buscar opciones en diferentes ciudades de países subdesarrollados, encontraron la Asociación Viento Norte Sur que trabaja en el orfanato de Essaouira en Marruecos y entonces supieron que era la opción perfecta.

Oportunidad única Eva, quien colabora con el Mago Oliver en su espectáculo, vio en la magia una oportunidad ideal para que Bilbao disfrutase de este proyecto. “En una conversación con el Mago Oliver nació la idea de la gala benéfica con los magos invitados”, explica la joven. Oliver, quien también está interesado en los sistemas educativos innovadores y de carácter artístico, les ayudó a dar forma a la idea inicial.

El proyecto consiste básicamente, en la compra, con los beneficios recaudados, de material escolar como pizarras, pinturas o cartulinas, así como de otros productos de carácter más teatral, como disfraces y kits de magia que enseñarán a usar a los niños marroquíes para darles una salida laboral en un futuro. Por ello, cada día después de que Eva y Alain colaboren con las actividades de la Asociación Viento Norte Sur, realizarán talleres empleando todos sus conocimientos de magia, teatro, música y pintura con los materiales adquiridos con anterioridad.

La gala, que según sus organizadores será “muy familiar” -el recinto tiene un aforo de 400 personas-, está dirigida principalmente al disfrute de los más pequeños aunque abre sus puertas a cualquier persona que quiera ilusionarse y colaborar con una buena causa. El evento también contará con juegos para niños y talleres de globoflexia para que los más pequeños que acudan a la cita disfruten, aprendan y pasen un “rato inolvidable”, sentencian. “La verdad es que no pensábamos que acabaría siendo algo tan grande” asegura Alain.