Bilbao - Iosu Madariaga lo tiene claro: lo que mide la eficiencia de un sistema de gestión de residuos no es cuánta basura se recoge de forma selectiva, sino el grado de su aprovechamiento como recurso. “No es tan importante cómo recoges, sino qué haces con ellos después, cuánto aprovechas. Podemos recoger los residuos de una forma muy efectiva, con unos índices de recogida selectiva muy elevados, pero si detrás no hay nada, si acaba en vertedero, lo que estamos haciendo es un fraude en el sistema”, destacó el diputado de Medio Ambiente. El responsable foral quiso matizar en su comparecencia de ayer un aspecto: en las bolsas de basura común hay un porcentaje importante de agua. “Un tercio de la basura es agua y se pierde en los procesos de tratamiento”, explicó. Sin tener en cuenta estas pérdidas, del total de basura generada en Bizkaia el 21% se elimina, el 44% se recicla y el 35% son pérdidas, “agua, que no es un material aprovechable”, pese a que con ese vapor se genera, por ejemplo, energía en Zabalgarbi. Pero eliminando ese porcentaje de agua, el reciclaje efectivo en Bizkaia se eleva hasta el 70%. “Son formas diferentes de plantear los números pero que indican el grado de eficiencia del sistema”, explicó.
Sin citar en ningún caso a Gipuzkoa y a Bildu, Iosu Madariaga afirmó que hay otros territorios en los que se registran recogidas selectivas del 40%, “pero la eficiencia del sistema es inversa: el 70% va a vertedero y solo aprovechan el 30%. Cuando se quieren desprestigiar los sistemas de un territorio por intereses políticos, hay que tener en cuenta no cómo se recoge, sino qué pasa luego con los residuos”.
Bildu acusó ayer a la Diputación, en relación a este balance, de ofrecer datos “interesados” y denunció que el sistema vizcaino es “insostenible” porque es “absolutamente dependiente” de Zabalgarbi. - A. Atxutegi