Getxo - La Agencia Vasca del Agua (URA) y el Ayuntamiento de Getxo han aprobado inicialmente la propuesta de creación de huertas ecológicas en Zubilletas. Este proyecto se encuentra ahora en la fase de exposición pública para la presentación de alegaciones como paso previo para su autorización definitiva. De esta manera, los propietarios del terreno habilitarán 88 parcelas, una caseta de aperos común para todas ellas, un pozo y un parking de 900 metros cuadrados con capacidad para alrededor de cuarenta automóviles.

Algunos vecinos de la zona han mostrado su contrariedad a este proyecto porque consideran que es un área inundable y que el hecho de habilitar allí huertas aumentará el peligro y porque temen que los abonos y productos utilizados se filtren directamente al río Gobela, entre otros motivos esgrimidos. No obstante, según explica el portavoz de los propietarios de esta superficie, Luis Ziskar, “URA tenía previsto hacer allí un parque fluvial, pero después lo descartó, ya que con las obras que ya está realizando y que va a emprender para reducir el riesgo de inundaciones en Getxo sostiene que no hace falta esa intervención”.

El representante de los dueños de la campa explica que cuentan con el permiso del Gobierno vasco para llevar a cabo su idea desde julio de 2012 -disponían de dos años para hacer la obra, así que han tenido que solicitar una prórroga-. Sin embargo, el Ayuntamiento, ante las quejas vecinales -a las que se sumaron las de la plataforma de Afectados por el Gobela- no les daba el visto bueno hasta analizar con rigor la situación. Finalmente, el Consistorio ha aprobado de manera inicial la propuesta de huertas lúdicas. “Todos los informes de URA y del Ayuntamiento son favorables”, destaca Ziskar, que, explica que dado que ese entorno era catalogado de inundable “los estudios han sido exhaustivos”. De hecho, la Agencia Vasca del Agua “nos ha dicho lo que podemos hacer y lo que no”.

En este sentido, los propietarios de este terreno de Zubilletas se han visto obligados a descartar ideas que tenían en mente realizar, como la inclusión de columpios, mesas y bancos a modo de merenderos. “La obra va a consistir únicamente en colocar unas estacas para las cuerdas que dividen las parcelas, poner grifos para cada cuatro huertas, habilitar una caseta de aperos común, porque individuales no nos dejaban, por lo que se pondrán allí las taquillas para cada usuario, y hacer un pozo y un parking”, enumera Ziskar, que por otro lado puntualiza que no se tirarán ácidos al río y que el abono que se empleará será natural.

La intención de los dueños de esta zona es que quien lo desee alquile las huertas ecológicas, que tendrán una extensión de 100 metros cuadrados cada una.