Un parque a medida
Un grupo de 23 alumnos de Portugalete diseña la zona de juegos infantiles de Mateo Hernández La plaza de Repélega se encuentra en estos momentos en plena reforma para mejorar la accesibilidad La iniciativa fue planteada por el PNV jarrillero para hacer partícipes a los pequeños
Portugalete - Quienes mejor conoce los parques, lo que se necesita, lo que es divertido, lo que gusta, son los niños. Por ese motivo, cuando se planteó la remodelación de la plaza Maestro Mateo Hernández, en el barrio portugalujo de Repélega, se pensó en que fueran los propios pequeños quienes pensaran cómo querían que fuese. Así, alumnos de diferentes centros educativos de la villa han cogido planos y, como arquitectos en potencia, han dado forma al futuro parque de la plaza en torno al programa Arkitente, que pretende acercar la arquitectura a las escuela.
Las excavadoras comenzaron a trabajar en la plaza el pasado mes de junio. Esta zona de recreo de Repélega necesitaba una actualización debido a su propia estructura. Y es que la zona, con cerca de 3.500 metros cuadrados fue construida a finales de los años 70 en cuatro alturas diferentes, lo que dificulta la accesibilidad. Los trabajos de remodelación, que están valorados en 1,8 millones de euros, eliminarán las cuatro alturas distintas de la zona para convertirla en un espacio diáfano y accesible.
Los trabajos se aprovecharán para colocar una nueva y moderna zona de juegos infantiles. Y es aquí donde los escolares de Portugalete han tenido un papel fundamental. Fue una iniciativa del PNV jarrillero la que dio voz a los pequeños para diseñar su parque. Hasta el pasado 10 de julio, 23 alumnos de la villa de entre 8 y 11 años, de diferentes centros escolares, han podido ponerse en la piel de un arquitecto a través del programa Jolasplaza, promovido conjuntamente entre el Área de Participación Ciudadana e Innovación Social del Ayuntamiento de Portugalete y Zaramari.
Colores, formas y usos Gracias a la iniciativa, los niños han podido diseñar la forma que tendrá el suelo, sus colores, el tipo de juegos que les gustaría encontrarse en la zona y el mobiliario urbano necesario para ello. Además, no solo han tenido en cuenta sus gustos y necesidades sino que también han pensado en las de los niños más pequeños.
El trabajo se ha realizado por grupos en la escuela Antonio Trueba. Los participantes han tenido que aportar sus ideas y llegar a un consenso con sus compañeros de grupo para decidir el futuro diseño del parque, que contará con cerca de 700 metros cuadrados.
Para poder aportar sus opiniones en este singular proceso de participación, los alumnos se han desplazado hasta la plaza, que se encuentra vallada por las obras. Allí han podido hablar tanto con el responsable del proyecto de la nueva plaza como con los técnicos municipales implicados en la reforma, que han mostrado a los pequeños el proceso de construcción.
Las ideas obtenidas de este proceso participativo serán tenidas en cuenta por el Ayuntamiento jarrillero a la hora de dar forma a la nueva zona de recreo de Repélega. Para ver el resultado habrá que esperar al menos hasta finales de año.