LOS viernes están envueltos en un aura de buen rollo. Están cargados de promesas de noches de cañas, de comidas con los colegas, de paseos por el monte, de quedadas de pintxo pote, de tardes de cine y de todas esas cosas que los comunes mortales hacemos cuando este mundo chalado nos regala un ratito de tiempo libre. Pero el de ayer fue un viernes más especial de lo habitual. Fue un viernes solidario, en el que se reconoció y apoyó la labor de mucha gente que roba tiempo a su tiempo para arrimar el hombro. Para ayudar a los demás. Sea viernes, jueves, martes o sábado.

Por la mañana, el punto de encuentro fue el Hotel Indautxu, donde se hizo entrega a representantes del comedor social San Antonio de los Franciscanos de Iralabarri de 250 litros de leche y cuatro enormes cajas de pastas. Este comedor social recibió el pasado año el premio Personaje Silencioso de la Villa, un galardón que pusieron en marcha un grupo de particulares para premiar a entidades o personas que trabajan por sus convecinos de Bilbao sin obtener nada a cambio. Así, esta entrega de productos forma parte de las que periódicamente organizan para este comedor los promotores del galardón. Julio Piñeiro, coordinador de esta iniciativa estaba ayer organizando la entrega de estos alimentos, en colaboración con Rafael Soto y Marino Montero, miembros del jurado de este premio, al que también pertenecen César Navarro, José Luis Martínez Caballero, Leopoldo Sánchez Gil, María Baqué, Nati Ruano, Sonia Sáenz de Buruaga y Koldo García. También estaba Asier Umaran, de Lotería Astarloa, que ha sido la entidad que ha recaudado entre sus clientes el dinero para comprar este lote de alimentos. Allí estaba Cristina Payo, del Hotel Indautxu, así como Pedro Cereceda, de Servilabel. En representación del comedor social estaba Fernando Morón.

Y ya por la noche, la Cruz Roja del Mar de Arriluce celebró en el Real Club Marítimo del Abra la XXII edición de su tradicional cena y desfile benéficos, cuyo dinero recaudado irá destinado a salvamento marítimo de esta entidad. Fue el mago Oliver el encargado de presentar esta gala a la que asistió, entre otros, Estanislao Rey-Baltar, presidente del Real Club Marítimo del Abra. También estuvo Mercedes Alcalá Galiano, presidenta de la Cruz Roja de Uribealdea, y Manuel Ángel Martínez, comandante naval de Bilbao, que acudió con Pilar Guillén. Allí estaba Iñaki Irusta, presidente de Cruz Roja País Vasco, y Andoni Rekagorri, del departamento de Acción Social de la Diputación de Bizkaia que fue con Almudena Torres. También asistió Javier Zarraga, presidente de Cruz Roja Bizkaia; Isabel Zarauza, alcaldesa de Plentzia; Pedro Gisbert, responsable de Salvamento Marítimo de Cruz Roja de Uribealdea; Itziar Coba, concejala de Erandio, y Alberto de Castro y José María Elorduy, ambos de Cruz Roja Bizkaia.