Barakaldo. Llegan las navidades y con ellas, las celebraciones, los brindis y los estallidos de los petardos. Como cada año, la Policía Local de Barakaldo ha iniciado una campaña especial para evitar que las calles se llenen de estos molestos elementos a través de su venta ilegal. Para ello, se inspeccionarán tanto con agentes uniformados como de paisano todos los locales comerciales en los que es ilegal tener a la venta material pirotécnico. El pasado año, en solo una semana de fiestas se requisaron 170 kilos de petardos en el municipio.
El operativo se extenderá por Barakaldo hasta que finalicen las fiestas navideñas. Así, se realizarán inspecciones en los comercios con el fin de requisar aquellos productos no homologados, en mal estado o que se comercialicen sin el pertinente permiso de las autoridades. Las personas propietarias de los locales que vendan petardos de forma ilegal se enfrentarán a multas por infracción grave que pueden alcanzar los 30.000 euros, según recoge el artículo 196 del Real Decreto Ley 563/2010, que regula la venta de artículos de pirotecnia.
Tal y como informaron ayer desde el Ayuntamiento baracaldés, las inspecciones de los agentes tendrán como objetivo evitar los riesgos para la seguridad ciudadana producidos por la venta ilegal de pirotecnia, fundamentalmente para los niños y niñas. "Entre los principales peligros de esta práctica se encuentran la manipulación sin conocimiento del material, el nulo control de calidad o un mal estado de la carga explosiva", enumeraron. La venta de estos productos está restringida a establecimientos especializados y en cada elemento existe una edad mínima para su manejo en función de su peligrosidad.
El pasado año, la Policía baracaldesa requisó los cerca de 200 kilos de petardos en bazares de la zona centro y Retuerto. En uno de los casos, el establecimiento contaba con hasta 63 kilos de petardos preparados para su venta, cuando el máximo permitido por comercio es de 5 kilos.