bilbao. Bilbao está en boca de todos a nivel internacional. El último hecho que ha hecho resonar el nombre de la capital vizcaina por todos los lugares del planeta ha sido el nombramiento de Iñaki Azkuna como mejor alcalde del mundo. Ese ha sido el último de los hitos que ha llevado a todo el mundo a poner sus ojos en la villa.

Todo ello ha sido producto de una profunda transformación que durante las últimas dos décadas se ha llevado a cabo en Bizkaia y que ha tenido a Bilbao como principal elemento tractor. Todo este gran cambio ha viajado en un medio de transporte que ha sido causa y, a la vez testigo, del nacimiento de un nuevo Bilbao. El metro es fruto del pensamiento de una ciudad y un territorio que querían proyectarse a nivel internacional de forma moderno y con mucho estilo. Por esto último, por el buen diseño y la originalidad, destaca el suburbano vizcaino. De este modo, la prestigiosa escritora especializada en temas de viajes Jessica Benavides Canepa, en un artículo para la CNN incluyó a las bocas del metro de Bilbao, más conocidos como fosteritos, dentro de los diez elementos más bellos de estos transportes en Europa.

La estructura acristalada de las entradas y salidas al metro y que está recubierta en los laterales con placas de color titanio, además de servir para que los viajeros salgan y entren de las entrañas del suburbano, también ha propiciado que el metro tenga una identidad propia, un distintivo inequívoco e inimitable en todo el mundo. "Lo más sorprendente sea, quizás, las entradas curvadas y acristaladas de algunas estaciones", describe Benavides en su artículo. La idea de que las bocas del metro tuviesen este innovador aspecto fue del arquitecto Norman Foster, diseñador del suburbano vizcaino. De este modo, este tipo de entrada que no todas las estaciones tienen -por ejemplo, Sarriko y Ansio no tienen este modo de acceso- adquirió el nombre de fosterito en honor al arquitecto británico.

Estas entradas aprovechan la luz natural de día y la luz artificial del exterior de noche y hace de estos accesos un punto luminoso a todas las horas del día. A juicio de Jessica Benavides, los fosteritos "están considerados como ejemplo de excelencia de las ciudades modernas". Las peculiares entradas al metro aparecen en esta lista junto a otros elementos distintivos de otros suburbanos europeos como la estación de estilo barroco de Komsomolskaya en Moscú, los futurísticos y curvados accesos a la parada de Canary Wharf en Londres y al vagón de tren que emerge del suelo y sirve de entrada a la estación de Bockenheimer Warte en el suburbano de Frankfurt entre otros. Así las cosas, Bilbao vuelve a resonar con fuerza en el panorama internacional, esta vez con motivo del diseño y la originalidad de su metro.