Santurtzi
Aquí siempre se encuentra algo". Mila Zubiarreta acaba de llegar a la Feria de Rebajas de Santurtzi y ya lleva una bolsa en la mano. "Es un jersey para mi nieta. Ahora solo hace falta que le guste porque los jóvenes solo piensan en ropa que puedan cambiarse muchas veces, no en la calidad", reflexiona antes de seguir rebuscando entre los percheros de esta octava edición. Se ha gastado 12 euros en el regalo. Alrededor de un 60% menos del precio original. Es la ventaja de esta iniciativa que los comerciantes llevan hasta mañana a la plaza Gernika.
Mila ha llegado desde Portugalete bien temprano. Lo hace cada año porque "viene muy bien esta feria para encontrar cosas muy bien rebajadas, sobre todo con esta crisis", resume. Veintiséis comercios han tenido la oportunidad en esta edición de mostrar sus productos a los visitantes. "Las rebajas de este verano han sido un poco más flojas que en otras ocasiones", comenta Antonio, que ha traslado un trocito de su negocio hasta el parque santurtziarra. "Tenemos mucha confianza en que estos días nos ayuden a salvar la temporada y liberar algo del stock", explica.
Las primeras horas ya presagiaban un éxito de público tal como venturaba Ricardo Ituarte, alcalde del municipio, al ver que, para cuando cortó la cinta inaugural, decenas de personas invadían ya el recinto. "A la mañana vienen a ver lo que hay, luego van a comer y es a la tarde cuando realmente se vende bien", explica Antonio, mientras observa como se llena el stand.
Y para quien no pueda ir a comer a casa, porque está de visita en Santurtzi, encontrará en la misma feria la solución. Es el caso de Marta, que ha venido desde Bilbao para hacer "unas compras" y se ha topado con estas rebajas. "He visto tanta gente que he entrado a mirar a ver si encontraba algo", destaca. Y lleva dos bolsas en la mano, por lo que parece que ha tenido suerte. "Comeré algún menú del día por aquí, aprovechando que hace bueno y estoy de vacaciones", apunta.
El menú le costará 18 euros, uno especial, gracias a la colaboración de los hosteleros con la Feria de Rebajas. Y es que por primera vez en las ocho ediciones en las que se viene programando el certamen, las asociaciones gastronómicas y hosteleras se han unido a la iniciativa para reforzar la oferta con menús competitivos y cañas de cerveza por un euro. "En los restaurantes hay over booking", apunta Joseba Ramos, de Santurtzi Gastronomika. "Estamos muy contentos, lo de la cerveza funciona", le complementa Idoia Brazaola, de la asociación El Abra. El calor aprieta y Ane y Diego han optado por beberse esa caña. "Es un gusto", dicen. "Hemos dado una vuelta por la feria y hemos encontrado varias cositas para él", desvela ella mientras mira a un tercero, el pequeño Ibai. "Para niños hay muchas cosas que merecen la pena, tanto de verano como de invierno", aconseja.
Hasta el 80% También Bego y Mamen, que acaban de recoger a los pequeños de su primer día de cole, han comprado ropa para ellos. "En zapatos hay muy buenas oportunidades" desvelan. Santurtzi se ha convertido en un gran centro comercial; un lugar donde no solo se puede encontrar ropa, sino que también hay menaje del hogar, pulseras, pañuelos, bolsos, lámparas, telas para cortinas, cojines... "Es una forma de darnos a conocer, de mostrar nuestro trabajo", explica Gaizka, de Almifesa Interiorismo; un local en el que ofrecían un moderno cuadro de 250 euros, por tan solo 100. "Todo de 5 a 30 euros", rezaba un cartel en la tienda de moda de la derecha. "¡Vaya precios, seguro que se os acaba pronto el género", comenta una clienta. "No, sacamos género cada día". "Esto no se acaba hasta mañana".