Lindane: en Barakaldo igual que en Bilbao
Un estudio revela que la exposición de los baracaldeses entra dentro de los baremos permitidos
Barakaldo. El lindane es un asunto candente en la actualidad de Barakaldo. No obstante, más de veinte años después del cierre de la fábrica que producía el pesticida tóxico, Bilbao Chemicals, localizada en Ansio, se sigue hablando de este espinoso tema.
En este caso se debe a que se acaban de publicar las conclusiones de un estudio realizado en 2008 en el que se revela que en el municipio fabril "no se observaron niveles significativamente mayores de hexaclorociclohexano (HCH)" que en las poblaciones de otras zonas del Bilbao Metropolitano.
Los datos de este informe se han publicado en la Revista Española de Salud Pública y han sido elaborados por un equipo de científicos de la universidad del País Vasco, el Gobierno vasco y otros centros de investigación en Euskadi y Nafarroa.
Concretamente las conclusiones de los investigadores señalan lo siguiente: "Los resultados de este estudio indican que la población general adulta de Barakaldo, villa muy industrializada hasta hace poco tiempo y con la presencia de una empresa de fabricación de HCH, se encuentra expuesta actualmente a PCBs y plaguicidas organoclorados en los mismos niveles que otras poblaciones adultas de Bizkaia". También destacan que "los plaguicidas y PCBs más persistentes en el organismo no muestran mayores niveles en esta población que en las poblaciones de referencia. El hecho de que el isómetro del HCH más persistente -el beta-HCH- no muestre mayor nivel en Barakaldo que en la población de control indica que no ha habido mayor grado de exposición a este contaminante ni recientemente ni a medio plazo derivado de focos puntuales o locales y que la fuente principal de exposición es común, apuntando a la alimentación", explican.
Sin embargo, los autores del documento revelan que "entre los trabajadores de la planta de transformación del HCH se observó que los niveles de beta-HCH eran significativamente superiores al resto de la población estudiada. La observación de un valor significativamente elevado de beta-HCH apunta a que estas personas aún no han eliminado la totalidad de este plaguicida", añaden.
El objetivo de dicho estudio ha sido medir la impregnación de un contaminante orgánico persistente (COP) en una población cercana a la planta. Para su realización se han analizado las muestras de sangre de 154 vecinos de Barakaldo, al menos desde el año 2000, y se han comparado con 270 de Balmaseda, Alonsotegi y Bilbao. El estudio se llevó a cabo en 2008 con la participación de 45 voluntarios del centro de salud de Lutxana, 48 de La Paz y 61 de Zuazo, además de seis trabajadores de la planta que eliminó los residuos de lindane en Ansio. La media de edad del análisis era de 53,5 años.
Detractores La asociación ecologista Ezpitsuak, a través de su portavoz, Javi Vázquez, una de las personas a las que se les realizó un análisis de sangre, consideró que "se tendría que hacer un estudio epidemiológico analizando muestras de grasa y del tejido adiposo, además de la sangre porque el lindane es acumulativo en el tejido adiposo y solo con la sangre sería incompleto". Esto es debido a su naturaleza lipofílica que se acumule en el tejido graso de todos los seres vivos. Asimismo, Vázquez también expuso que dentro del estudio epidemiológico "primero habría que ver la incidencia de cáncer y qué tipo hay en Barakaldo respecto a otras poblaciones para ver si tiene o no relación".
Por último, Vázquez volvió a hacer un llamamiento a las administraciones públicas para que reculen y pospongan la decisión de conectar el pantano de Oiola a la red de abastecimiento de Barakaldo. "Tiene que prevalecer el sentido de la precaución", concluyó.