El Aconcagua, en 3D
Docentes de Txorierri prueban esta tecnología con un vídeo en alta montaña
Desde aquellas rudimentarias gafas de lentes azul y roja, la tecnología 3D ha avanzado tanto que ya ha llegado hasta el cerro del Aconcagua en Argentina. La hazaña se llevó a cabo por primera vez el pasado enero, cuando dos profesores de la Politeknika Ikastegia Txorierri (PIT) de Derio se unieron a la expedición de Juanito Oiarzabal hacia el pico más alto de América. Hacer cumbre a 6.979 metros de altura con temperaturas gélidas (-25º) entraña de por sí grandes dificultades. Por tanto, grabarlo en 3D tiene más mérito si cabe. "Teníamos que adelantarnos al grupo de montañeros para grabarlos de frente, y luego retroceder otra vez. ¡Y todo ello sin trípode!", comenta Jon Arisketa, profesor del Departamento de Electrónica y Telecomunicaciones del PIT. La idea surgió a raíz de la afición por la montaña de su colega Jokin Goioaga. "Uno de los objetivos era poner a prueba el equipo técnico -cedido por la empresa Panasonic-, para averiguar qué tipo de problemas pueden surgir en el empleo de este tipo de tecnologías en condiciones extremas", explican los docentes.
Esta singular ascensión se enmarca en el proyecto Nuevas tecnologías en televisión en alta definición, coordinado por TKNIKA, el centro de Innovación para la Formación Profesional del País Vasco. Las cerca de diez horas de filmación y su posterior edición servirán asimismo para elaborar material didáctico "actualizado y ajustado a la realidad", añaden. "La innovación es una de las líneas estratégicas del PIT, y este proyecto supone un compromiso importante para avanzar en la implantación de la tecnología 3D en el ámbito educativo", apunta el director del PIT, Juan Ángel San Vicente. En esa línea, se prevé que en el curso 2012/2013 se incorpore esta disciplina al currículo escolar.
Al margen de las baterías casi congeladas -que recargaban con paneles solares-, los encuadres y los planos aberrantes, los profesores también trajeron alguna que otra anécdota en la maleta, como la peculiar merienda que les preparó Oiarzabal: "También nos preparó paella y patatas a la riojana", añaden los audaces docentes.