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Un hombre muere arrollado por el metro en Barakaldo

El accidente provoca momentos de angustia entre los usuarios y retrasos en el suburbano

Bilbao. Un hombre perdió la vida ayer tras ser arrollado por una unidad de metro a su paso por la estación central de Barakaldo. Debido al accidente, se vivieron momentos de angustia entre los usuarios que fueron testigos de los hechos. Asimismo, la estación quedó cerrada durante una hora y se implantó el servicio de vía única entre Bagatza y Cruces, por lo que se registraron retrasos en el servicio de transporte público.

El atropello se produjo en torno a las 11.50 horas en la estación central del metro a su paso por la localidad de Barakaldo. Alrededor de 70 personas esperaban la llegada del convoy cuando, por causas que se desconocen y que la Ertzaintza investiga, un hombre de 78 años fue arrollado por el metro que viajaba en sentido Bilbao. Según exponen los testigos, el hombre fue golpeado por la unidad y quedó atrapado entre el andén y el vagón, siendo arrastado durante muchos metros.

Inmediatamente, el conductor que dirigía la unidad, antiguo maquinista de EuskoTren con cerca de 30 años de experiencia, se puso en contacto con el puesto de control de mando centralizado de Metro Bilbao para iniciar el protocolo en estos casos. El puesto de mando se encargó de alertar a SOS Deiak, que rápidamente desplegó el dispositivo de emergencia. Los agentes de la Etzaintza, de la Policía Municipal de Barakaldo, los Bomberos de Diputación y los sanitarios trataron de rescatar al hombre herido. Lamentablemente, no pudieron hacer nada por él y, finalmente, falleció.

La estación central de Barakaldo permaneció cerrada hasta las 13.10 horas para facilitar el trabajo de los sanitarios. La red de metro circuló con retrasos al implantarse un servicio de vía única entre las estaciones de Bagatza y Cruces. El resto de los trenes pudo continuar con sus itinerarios habituales en toda la red.

Los testigos En el momento del accidente, numerosas personas esperaban la llegada del metro y fueron testigos del "desagradable suceso". Muchos de ellos sufrieron cuadros de ansiedad y tuvieron que ser atendidos por los equipos sanitarios que se acercaron al lugar.

"Ha sido muy raro, no nos explicamos cómo ha podido pasar. La gente a veces es un poco imprudente, pero vete a saber lo que ha pasado", afirmaba Beatriz de Rivero, vecina de Barakaldo, que en el momento del accidente bajaba por las escaleras de acceso al andén. "Menos mal que no he visto el cuerpo, porque me da algo. Se me hubiera grabado en la retina. Aun así, cada vez que vuelva a coger el metro me acordaré de este día", señalaba. Beatriz no será la única que no olvidará el día de ayer. Para las cerca de 70 personas que esperaban en el andén de la estación central de Barakaldo tampoco será fácil borrar este "mal recuerdo". "Dicen que la cara es el espejo del alma. He visto la cara de los testigos y estaban descompuestas. Ha sido muy desagradable y se les quedará grabado para siempre", añadía la barcaldesa. "Son cosas que piensas que nunca vas a tener que presenciar pero mira. Nos hemos quedado impactados", relataba.

Beatriz destaca la "la coordinación y la profesionalidad de todo el mundo" entre los trabajadores, los equipos de seguridad y de limpieza del metro que, "rápidamente, han derivado a los pasajeros al otro anden para que continuaremos nuestro camino y lo han limpiado todo", explica. Y es que, una hora después del accidente, se restableció el tránsito habitual de trenes. A ello contribuyó el trabajo realizado por la Ertzaintza, la Policía Local de Barakaldo, así como por las dotaciones del parque de Bomberos de Urioste de la Diputación Foral de Bizkaia y los sanitarios de la DYA, que trataron de salvar la vida de la víctima y, además, atendieron al resto de usuarios.

Beatriz asegura que también el comportamiento de los usuarios fue "muy civilizado", aunque también reconoce que en gran parte se debió al shock que sufrían los testigos. "Solo un chico se ha acercado con el móvil hasta donde estaba el hombre, al parecer para sacar una foto. Pero enseguida se lo han impedido los vigilantes de seguridad y los agentes de Policía", añade.