Güeñes. El Ayuntamiento de Güeñes teme que el cierre de la Cooperativa de Enseñanza de Las Encartaciones condene al abandono las instalaciones del barrio de Lambarri y por eso ha trasladado al departamento de Educación del Gobierno vasco una alternativa que permitiría dar una utilidad al edificio. Así, plantea que sus aulas vuelvan a llenarse de estudiantes al impartirse allí las clases de Secundaria del centro público Eretza, de Sodupe, de forma provisional hasta que se construya la ampliación del instituto.

Hace cinco años que los alumnos permanecen instalados en módulos prefabricados para responder a la falta de espacio. "Instalar más no es la solución y no hay sitio para las nuevas matriculaciones. Los padres se quejan, y a nuestro entender, con toda la razón", explicó el alcalde de Güeñes, Koldo Artaraz. "Educación debe decir algo y el alquiler de Coenen puede ser una salida temporal", añade. Desde que se conoció la noticia de la clausura del colegio, el Consistorio trasladó al Gobierno vasco la posibilidad de destinar la infraestructura a albergar un centro de Formación Profesional centrado en las nuevas tecnologías y la innovación. Sin embargo, la iniciativa no convenció a Lakua. Pero este nuevo uso parece que ha sido mejor recibido y se está estudiando su viabilidad.

La asociación de padres de Coenen también lo ve con buenos ojos. "No queremos ver por nada del mundo que esto se caiga. Por eso, pensar que puede que volvamos a observar el patio otra vez lleno es una noticia estupenda. La gente de Güeñes lo apoyaríamos sin dudar", valora una de sus integrantes. Todavía no han superado el duro golpe que supuso darse cuenta de que el cierre era irreversible. "Mis hijos siguen preguntando a ver por qué su colegio está vacío y no pueden seguir acudiendo allí. También intentamos que queden con antiguos compañeros desperdigados por otros sitios, para que no pierdan la amistad", dice con pena. Como pena les da 40 aulas y está muy bien comunicado, con el apeadero de Feve y la parada del autobús a escasos metros", detalla.

Otra de sus fortalezas era la oferta integral de educación, desde los cero hasta los 18 años. En la comarca se advierte una gran demanda, en particular el primer tramo de edad, a juicio de los padres de alumnos: "Las más cercanas son las del colegio Avellaneda, de Sodupe y la de Aranguren, en Zalla, que no son suficientes para el incremento de nacimientos que hay en Enkarterri".

La medida permitiría, además, solucionar la problemática que plantea la avalancha de matriculaciones registradas en Sodupe, a raíz del cese de la actividad docente en Coenen. El periodo de inscripción para el próximo curso escolar acaba de iniciarse y se han repartido que sobre todo, entre los otros dos colegios del municipio: Avellaneda y Eretza. Basta con mencionar que "se ha duplicado el número de monitores que acompañan a los alumnos en el autobús".

Las obras para construir la ampliación del instituto de Secundaria de este último están estancadas a la espera del siguiente movimiento del Gobierno vasco. El alcalde de Güeñes, Koldo Artaraz, vaticina que "por mucho que se quiera correr ahora, se demorará al menos dos años, hasta el curso 2012-2013". "Nosotros nos comprometimos a ceder un terreno recalificado para ello y hace un año que disponen de él", concluyó.