“Nosotros somos honrados, no somos oportunistas”, garantiza una camarera en un bar de la Plaza Nueva, habituada a recibir extranjeros, donde los precios se han mantenido con respecto a las tarifas habituales.
No es el caso de las fan zones, ya que su condición de establecimiento efímero les ha permitido subirse al carro. ¿Una caña de 40 cl? A un módico precio de 5 euros mientras, que el katxi de cerveza de 90 cl cuesta 10 euros. La consigna que parece haber primado en estas miniciudades inglesas es subir los precios sin llegar a los costes del país de origen de los forofos, una estrategia inteligente, aunque quizás no muy honorable.
Katxis para los ingleses
“Para mí es un lío cambiar precios”, asevera al respecto Maren Iturburu, del bar Iturriza, donde la única diferencia con respecto a cualquier otro día es que han añadido los katxis de cerveza a su oferta. “Lo hemos puesto a 7,90 euros mientras que la cerveza cuesta 2,9 euros, pero tenemos Alhambra, que es la mejor cerveza de la Plaza Nueva y, posiblemente, la más barata”, garantiza este hostelero sobre una dinámica que es similar en todo el Casco Viejo.
“La que más se está vendiendo es la más barata: una pinta a 4 euros”, explica Oscar Queso, encargado de The Craft, un bar de cervezas artesanas ubicada en la calle del Perro. “Los precios se mantienen”, asevera.