El espíritu comercial ha estado ligado siempre a Bilbao, incluso desde sus primeros años de existencia. Los nuevos hábitos de consumo y el boom del comercio digital están provocando que el sector no pase hoy en día por su mejor momentos; desde 2008, en la villa han cerrado la persiana 2.154 establecimientos, una media de 180 cada año. Para tratar de revertir esta situación, el Ayuntamiento va a seguir implementando medidas, como un plan para sacar al mercado las 200 lonjas municipales que hoy en día no tienen uso y la extensión a Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala, de las bonificaciones para movilizar espacios vacíos tras su experiencia positiva en el Casco Viejo.

Según explicó ayer en el pleno la concejala de Vivienda, Yolanda Díez, sobre las tres propuestas planteadas por EH Bildu en este ámbito, Viviendas Municipales dispone, además del parque residencial, de 900 fincas de las cuales 200 están en desuso. “Hay lonjas con una buena ubicación, dimensión y capacidad para iniciar una actividad sin necesidad de realizar inversiones sustanciales”, explicó. El objetivo es sacarlas al mercado, al menos el máximo posible de ellas, y para ello se va a actualizar el inventario y pondrán en marcha un programa específico para movilizarlas, “que haga atractivo el alquiler o la cesión de uso”. También revisarán los valores de renta de los locales, “estableciendo condiciones especiales para zonas con procesos de regeneración en marcha”, como Otxarkoaga y Bilbao La Vieja. El objetivo es, subrayó, “optimizar el patrimonio, evitando que caigan en desuso y, sobre todo, en la ineficacia”, así como “generar valor añadido a los barrios y a la ciudadanía en general”.

Bonificación del alquiler

Otra de las iniciativas que se desarrollarán este año es la extensión a Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala del programa de bonificaciones al alquiler que se puso en marcha en el Casco Viejo y que ha permitido movilizar ya ocho locales. Las ayudas asumen el 50% del alquiler del primer año para nuevos emprendedores -con un tope máximo de 4.000 euros-, y otras bonificaciones para la cobertura de un seguro de impagos y desperfectos. “Es una medida que ha funcionado bien y que en 2024 prevemos llevar a otros barrios”, señaló el concejal de Desarrollo Económico, Comercio, Turismo y Empleo, Xabier Ochandiano.

El edil también recordó que en los presupuestos de este año está recogido la creación de un vivero de comercios, tal y como planteó EH Bildu, aunque dudó de que su ubicación más idónea sea la estación de Abando. “La idea es que los jóvenes emprendedores tengan un espacio físico para desarrollar sus negocios, testar sus ideas y consolidar iniciativas empresariales”, destacó su portavoz María del Río, en un espacio “céntrico y de paso como la estación de Abando, donde existen numerosas lonjas vacías”.

Ochandiano cuestionó esa ubicación, ya que “las estaciones, en general, no son los mejores espacios de carácter comercial. Son sitios complejos y curiosos donde las realidades comerciales, dependiendo del subsector comercial, no suelen funcionar del todo bien”.

Además, advirtió de que para ello se debería firmar un convenio con Adif, propietaria de la estación, “cuando tenemos locales propios municipales, capacidades propias como Ayuntamiento y recursos tanto de propiedad municipal como la oportunidad de cooperar con personas privadas para activar locales. Lo vamos a hacer pero no parece que la estación de Abando sea el lugar ideal”. Por último, el concejal recordó que el fenómeno de los locales vacíos “está pasando en todas las ciudades a nivel mundial”.