Además de la coordinación continua que mantienen con la UPV/EHU desde el propio centro hospitalario también han concretado acciones internas para rebajar los posibles problemas que lleguen desde el exterior.

Fuentes de Osakidetza y de la gerencia del Hospital de Basurto especificaron a DEIA las tres áreas donde trabajan para evitar problemas tanto en el pabellón Arrupe donde se atienden los consultas externas como el pabellón Ampuero que acoge enfermos en sus tres planas de altura. La primera línea de actuación pretende implementar medidas que sean barrera para evitar la aparición de infecciones. Por ello, además de la instalación de una malla para reducir la diseminación de polvo en el recinto hospitalario y la humectación de la zona de trabajo y de los escombros con el fin también de que se levante polvo, se ha procedido al sellado de las ventanas de los edificios colindantes con la obra o en los espacios donde se encuentren personas vulnerables.

Estas medidas se han tomado ya incluso antes de que entraran las primeras máquinas y desde entonces se lleva una vigilancia exhaustiva para comprobar que estas acciones está siendo efectivas. Es la segunda área de trabajo que lleva a cabo la gerencia hospitalaria para la que se está llevando a cabo un muestreo ambiental de hongos en las áreas de riesgo, como medida más importante. Así mismo, cada poco tiempo se procede a una inspección visual de la integridad de los sellados colocados para que, en caso de que haya algún deterioro, se restaure la clausura. De igual manera se controla la correcta implantación de las medidas de barrera y la evaluación de su efectividad.

También se vigila que la limpieza de las áreas afectadas por los trabajos es la adecuada y si por cualquier razón aumenta la materia en suspensión está previsto incrementar la frecuencia de limpieza.

La tercera línea en la que se trabaja es en el confort sobre todo de los empleados sanitarios y los pacientes. Entre otras medidas que se puedas adoptar en el futuro se le ha entregado tapones para usar en los oídos y minimizar el impacto del ruido que pueda llegar todavía desde la zona de trabajo.