El Ayuntamiento de Bilbao obtuvo el pasado año un total de 12,8 millones de euros en concepto de sanciones de tráfico, según un estudio elaborado por Dvuelta, empresa de servicios jurídicos especializada en la gestión de recursos de multas de tráfico.

Una cifra que le sitúa en el quinto lugar de las diez ciudades con mayor población del Estado por debajo de Madrid, con 199,3 millones de euros, seguida de Barcelona (62,2 millones de euros), Sevilla (22) y Palma de Mallorca (20,8).

El informe realizado por primera vez por esta empresa recoge también los datos de Málaga, con 12,1 millones de euros cobrados, Zaragoza alcanzó los 12 millones, Valencia (8), Las Palmas de Gran Canaria (7,1) y Murcia, con 5,5 millones de euros.

Hay que tener en cuenta que, de la decena de urbes analizadas, las de mayor población en el Estado, la capital vizcaina es la que menos habitantes tiene, según la estadística del INE del pasado año, 344.127 vecinos, y la que menos vehículos tiene circulando por sus calles, en concreto 185.288, según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) de 2021.

Relata el informe el “afán recaudatorio de Madrid” que con 199,3 millones de euros duplica a la segunda ciudad, Barcelona, que a su vez también ingresó el pasado año casi el triple de euros que Sevilla, tercera en este peculiar ranking.

Donde Bilbao sube en la lista, en concreto al segundo puesto, es si comparamos el dinero ingresado en las arcas municipales por las sanciones de circulación con el número de vehículos. Mientras la capital del Estado sigue a la cabeza con un promedio de 101,2 euros por vehículo, en Bilbao, el importe medio se situó en 69,4 euros, seguido a corta distancia en Barcelona con 68,9 euros.

Para hacer más homogénea la comparación también se relaciona dinero ingresado por los consistorios y número de habitantes. En este ranking Bilbao vuelve a estar por encima aunque se queda en el cuarto lugar con una media de 37,4 euros por habitante. Encabeza de nuevo Madrid, con una media de 60,8 euros, seguida de Palma de Mallorca (50,2) y Barcelona (38). Destaca como Valencia con algo menos de 793.000 habitantes tan solo recauda 10,1 euros por vecino.

Por impuesto de circulación

El estudio especializado ha metido también otra variable económica al dato meramente sancionador. Se ha fijado en lo que pagan los vecinos de las ciudades por el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), conocido coloquialmente como el impuesto de circulación.

Lógicamente, la capital del Estado es la que, al contar con mayor número de vehículos, 1,96 millones, más recauda, en concreto, 145,1 millones. Por su parte, Bilbao se queda en el noveno puesto, con 18,8 millones ingresados, solo por encima de Las Palmas que no llegó a los 15 millones de euros. Donde Bilbao destaca sobre manera es al comparar los ingresos municipales y los vehículos censados. La capital vizcaina es la primera de la lista liderando a las ciudades que con menos parque móvil más elevado cobran el impuesto.

Este es el único ranking que no lidera Madrid ya que la recaudación por el IVTM en Bilbao se sitúa, de media, en 101,4 euros por vehículo, mientras que en Zaragoza se sitúa en 84,6 euros y en Murcia en 77,9 euros. Les siguen Sevilla (76 euros), Valencia (74,9), Madrid (73,6), Málaga (69,9), Palma de Mallorca (68,9), Barcelona (59,3) y Las Palmas de Gran Canaria (56,8).

El informe analiza como en las últimas dos décadas los consistorios “han ido incorporando a su menú de multas infracciones que antes no existían” e incluso nuevas ordenanzas que “solo buscan aumentar la recaudación”.

Como ejemplo ponen las áreas de estacionamiento regulados, la instalación de radares fijos y el uso de móviles y dinámicos o la limitación de velocidad a los 30 kilómetros por hora. Como última medida añadida a este catálogo, el informe nombra las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) que Bilbao tendrá que activar antes de finalizar el año y cuya legalidad ya ha sido cuestionada en otras ciudades que la han implantado. De hecho esta misma empresa autora del informe fue la que posibilitó hace unos años que se tirara para atrás el Madrid Central que buscaba el control de la contaminación producida por el tráfico y recientemente la ordenanza municipal aprobada en Oviedo.

Un cuestionamiento jurídico que está teniendo en cuenta el Ayuntamiento de Bilbao a la hora de la redacción final de la ordenanza necesaria para la puesta en marcha de su primera ZBE que, por ley estatal, deberán implementar todas las ciudades que superen los 50.000 habitantes.

También pone sobre la mesa el estudio que las ciudades son más voraces a la hora de sancionar que la dirección de Tráfico a nivel de Estado que controla las carreteras y autovías que recorren la península. Exceptuando el País Vasco y Cataluña, cuyas autonomías gestionan las multas de tráfico, la DGT ingresó en 2021 alrededor de 440 millones de euros para un parque automovilístico de 35,2 millones de vehículos. Solo Madrid recauda un poco menos de la mitad de esta cifra, los mencionados 199,3 millones, “con un parque de vehículos 18 veces menor”, destaca el informe de Dvuelta.

Metodología del informe

Datos municipales y estadísticos

Previsión de ingresos. El informe ha acudido a lo que preveían obtener por sanciones los presupuestos municipales correspondientes a 2022. Han usado esta cifra municipal más prudente y beneficiosa y que “normalmente es superada por la cantidad total real verificada posteriormente a lo largo del ejercicio”. Los datos de recaudación por Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica también son de los presupuestos.

Datos de INE y la DGT. Para la determinación del parque de vehículos a motor de cada municipio se han tomado los datos estadísticos de la DGT cerrados a 2021, últimos disponibles, e incluyen todos los vehículos a motor matriculados en el municipio. Para comparar población se han tomado los datos del Instituto Nacional de Estadística cerrado a 1 de enero de 2022. Este informe tiene vocación de continuidad, por lo que se analizarán los datos en ejercicios sucesivos para analizar la evolución de la presión recaudatoria de los ayuntamientos.