El Ayuntamiento de Bilbao ha recordado este martes con una ofrenda floral el 158 aniversario del nacimiento del filósofo y escritor Miguel de Unamuno.

La ofrenda floral, realizada en la plaza del Casco Viejo que lleva su nombre, ha estado encabezada por el alcalde, Juan Mari Aburto, y el resto de concejales, ha informado el Ayuntamiento.

Bilbao rinde homenaje a Miguel de Unamuno

Bilbao rinde homenaje a Miguel de Unamuno Bilboko Udala

La principal actividad programada este año por el Consistorio en recuerdo de Unamuno es una exposición en el centro municipal de Barrainkua con retratos realizados por el mismo Unamuno, así como retratos suyos dibujados por conocidos artistas coetáneos, como Macario Marcoartu, Joaquín Sorolla o su gran amigo Manuel Losada.

La exposición se abrirá el viernes 30 y un día antes tendrá lugar una conferencia en la Biblioteca Bidebarrieta sobre estos retratos con Marta García Gasco, comisaria de la exposición, y Ana Chaguaceda, directora de la Casa Museo Unamuno en Salamanca.

Aburto ha recordado que Unamuno fue propuesto al Nobel de Literatura en 1935 por la Universidad de Salamanca, que lo calificó como "uno de los representantes más importantes e interesantes de la espiritualidad y el pensamiento". Y era, según los expertos, el candidato "mejor posicionado aquel año", ha añadido, para indicar que la Academia sueca declaró desierto el premio, "algo que no había ocurrido ni ha vuelto a ocurrir nunca en la historia del Premio Nobel de Literatura, salvo durante las dos guerras mundiales".

Al parecer, ha dicho, fue el Ministerio de Asuntos Exteriores de la Alemania nazi "quien presionó a la academia sueca argumentando motivos nacionales y político-culturales", ya que Unamuno en 1933 "suscribió el manifiesto contra la Alemania nazi, junto a Gregorio Marañón, José Ortega y Gasset y otros intelectuales, que calificó a Adolf Hitler como ese pobre Führer, un deficiente mental y espiritual", a la vez que definió a Mussolini, como "el caudillo peliculero de los camisas negras".

A juicio del alcalde, "es más que probable que con manifestaciones como esa se convirtiera en persona non grata para el nazismo y para el fascismo".

Al año siguiente, en 1936, ha recordado Aburto, Unamuno fue nominado de nuevo para el Nobel de Literatura, que recayó en el dramaturgo estadounidense Eugene O'Neill. Cuando la Academia sueca hizo público el fallo el 12 de noviembre de 1936, Miguel de Unamuno ya se encontraba arrestado en su domicilio de Salamanca, "tras el feroz enfrentamiento con el fundador de la Legión, el general Millán Astrain, en el celebre acto del 12 de octubre del paraninfo de la Universidad de Salamanca".